Evita lesiones
| Autor | Juan Ramón Piña |
El ciclismo es un deporte dinámico, que practicado recreativamente o de forma competitiva ofrece grandes beneficios a la salud.
Sin embargo, al tratarse de una actividad que combina velocidad, equilibrio, coordinación y manejo de fuerzas de gravedad, su práctica está rodeada de riesgos.
También, y como en cualquier otro deporte, la práctica esporádica o metódica de cualquiera de sus especialidades acarrea una serie de lesiones.
A pesar de los grandes avances en la investigación biomédica del deporte y del derroche tecnológico en los implementos deportivos, las lesiones siempre van a existir.
Juan Luis Flores, maestro en Salud Pública por la UANL y en Control Médico del Entrenamiento Deportivo por el Instituto Superior de Ciencias Médicas de La Habana, te da algunos consejos que debes tomar en cuenta.
CIFRAS DE LESIONES
Las lesiones en el ciclista se asocian, por lo general, a la repetición del gesto deportivo o técnica asociada al pedaleo, a la postura sobre la bicicleta, a la velocidad y a la superficie del terreno.
La localización más frecuente de las lesiones en el ciclismo de ruta es en codos, muñecas y clavícula, en un 28 por ciento.
Después están las lesiones en miembros inferiores: cadera, rodilla y tobillo, en un 25 por ciento, y luego cráneo y cara con 18.
En el ciclismo de montaña aumenta la incidencia de lesiones en miembros superiores, con 60 por ciento; miembros inferiores con 35, y cráneo y cara con 5.
Clasificación
Las lesiones en el ciclismo se clasifican en traumáticas y lesiones propias del par ciclista-bicicleta.
Las traumáticas
Contusiones
Este tipo de traumatismos representa el 32 por ciento de las lesiones, aunque por lo general no son incapacitantes.
Suelen presentarse por contacto directo contra otro vehículo, el suelo o un obstáculo.
Por lo general se presentan inflamación y hematomas subcutáneos que sanan en pocos días.
Una contusión craneal, como el traumatismo craneoencefálico o TCE, puede ser grave, porque puede provocar efectos en el estado de conciencia del deportista.
También pueden aparecer fracturas de cráneo, base de cráneo, macizo facial o columna cervical, lesiones cerebrales y hematomas subdurales y epidurales.
Éstas con signos y síntomas de TCE severo, puede haber pérdida transitoria de la conciencia, alteraciones de la pupila, vómito, hemorragia nasal y/o por los oídos.
Abrasiones cutáneas y heridas
Representan el 26 por ciento. Aparecen por golpes directos en hombros, caderas, codos, tobillos y piel...
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