Enloquecen con la WWE

AutorEnrique Guadarrama y Adolfo González

Sentimientos de júbilo, llanto y emoción al ver a las máximas estrellas de la WWE, enmarcaron anoche una velada inolvidable en la Arena Monterrey, donde unos 16 mil aficionados se rindieron ante la lucha libre estadounidense, la más espectacular del mundo.

Los regios que presenciaron por vez primera un evento de la WWE-RAW se comportaron como unos expertos, sólo era cuestión de ver cómo interactuaban con los luchadores para contagiarse de su euforia.

El conteo progresivo en inglés, máscaras, cartelones de todo tipo, playeras con leyendas de Stone Cold, HBK y Rey Mysterio, le dieron el toque especial al evento de anoche.

"¿Y dónde está El Santo?", era una de las decenas de pancartas que se pudieron leer en la Arena.

Rey Mysterio se llevó la noche con su carisma y sus lances acrobáticos sobre el cuadrilátero, aunque no logró redondear su batalla al fallar en su intento de recobrar el título Crucero de la WWE ante Chavo Guerrero Jr.

Su "majestad" Rey Mysterio cumplió con lo prometido en una entrevista anterior al decir que iba a sorprender a los regios.

Cuando el anunciador dijo su nombre, el gladiador apareció por el túnel de la Arena Monterrey con un traje mexicano y la bandera de México en lo alto de sus hombros.

Esta situación provocó que los aficionados se le entregaran al originario de San Diego, pero de padres mexicanos.

Los gritos de: "¡México, México!", ensordecieron la Arena provocando una comunión entre el luchador y los presentes.

Un detalle que causó la hilaridad de los presentes fue cuando Shawn Michael le bajó los pantalones a Ric Flair, quien siguió el combate con el trasero descubierto durante dos minutos en la lucha por el título mundial de parejas. En este combate, Flair y Batista retuvieron el cetro.

En la pelea estelar y una de las más vibrantes de la noche, Chris Benoit retuvo el título Pesado ante Triple H.

Desde temprana hora cientos de aficionados esperaban con ansiedad el arribo de la caravana de la WWE preparados con todo tipo de souvenirs para que éstos fueran autografiados.

Al abrirse las puertas, después de las 18:00 horas, los aficionados abarrotaron los puestos de souvenirs.

"No se avienten", les decía una vendedora de playeras, quien al final dijo que le habían comprado cerca de 10 mil camisetas, y la más solicitada fue la de Stone Cold.

Uno de los luchadores más ovacionados, además de Mysterio, fue el canadiense Chris Jericho, quien recordó las batallas que escenificó hace 10 años en Monterrey, además Chris...

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