Cuando la empresa enferma al empleado
| Autor | Veronica Gascón |
Seguramente usted ha visto un empleado que diariamente soluciona un "bomberazo", pero que al final del día, siempre se siente preocupado por su futuro.
O quizás ha presenciado el enojo de un subordinado al que le pide cumplir con tareas colosales dándole poco tiempo para realizarlas.
Tal vez, ha platicado con alguien dentro de la organización que lleva días sin tener una tarea asignada y se siente agobiado.
¿Qué les sucede a todos ellos? padecen por las prácticas erróneas de la organización, la cuales hacen funcionar el negocio, pero terminan enfermando a sus empleados.
En México, 8 de cada 10 personas considera que el estrés se ha propagado en sus organizaciones.
El dato no es menor porque esto genera ambientes de trabajo donde las personas tienen dolores de cabeza, ansiedad, insomnio y desgaste físico, entre otros padecimientos.
Según un estudio de la firma Randstad, con base en una encuesta a 2 mil 500 personas, el 57 por ciento de los mexicanos consideran que sufren los efectos del estrés laboral.
Las enfermedades sicosomáticas y el cansancio son los primeros síntomas; le siguen accidentes laborales, distracción, errores recurrentes, apatía, nula motivación, y carencia en las capacidades de innovación y creación.
"En su afán por lograr los resultados de negocio deseados, muchas empresas caen en la ejecución de malas prácticas que generan ambientes de trabajo donde impera el estrés.
"Sin darse cuenta que son éstas mismas prácticas las responsables de generar un estrés que daña a la productividad de la empresa", señaló la firma.
Tome en cuenta las prácticas erroneas que generan estres laboral: exceso o falta de trabajo; objetivos poco realistas y tiempos inadecuados para su cumplimiento; puestos con responsabilidades múltiples pero con poca autoridad; además de condiciones de trabajo desagradables o peligrosas.
"Contar con programas que minimicen el estrés laboral es tarea que todas las empresas deberían llevar a cabo, pero que no siempre sucede", advirtió Randstad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, si el estrés laboral afecta a un gran número de trabajadores o a miembros clave del personal, puede amenazar el buen funcionamiento y los resultados de la empresa.
Las compañías que tengan un ambiente enfermo, enfrentan varias consecuencias como: deterioro en el rendimiento y productividad, aumento de las quejas de usuarios y clientes, incremento de problemas legales ante demandas presentadas por trabajadores y deterioro de...
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