Sergio Elías Gutiérrez / Recuperación, ¿éste es el año?
| Autor | Sergio Elías Gutiérrez |
Apenas empezamos el año del Bicentenario-Centenario y las cosas no pintan con el optimismo con que las ve el Presidente Felipe Calderón.
De entrada, admito sin reservas que el Presidente de México está obligado a ser optimista de tiempo completo, aun en los tiempos de adversidad. Si el Presidente dijera la verdad de cómo andamos, la crisis se recrudecería por la desconfianza crónica que padecemos. Queremos promesas, no realidades, es una de nuestras máximas.
En su ya tradicional mensaje de año nuevo, Calderón hizo énfasis, quizá demasiado, en que los tiempos malos del año viejo quedarán atrás y que éste será el año de la recuperación económica. Por supuesto, como sucede en este tipo de mensajes, no ofreció datos duros que permitan saber cómo se recuperará la economía después de largos años de crisis interna ahora agravada por la situación mundial.
Al día siguiente de manifestar esos buenos propósitos vino la declaración contra gobernadores y alcaldes, a quienes llamó a dejar de gastar los "amplísimos recursos que se destinan a materias que en ocasiones no son las sustanciales".
El reclamo fue hecho en la presentación de un estudio sobre el proceso presupuestario del País, realizado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), que, según se dijo, mereció la aprobación de ese organismo.
Además de que el foro elegido no parece ser el mejor para lanzar un reclamo de esa naturaleza, no debemos perder de vista que además legalmente todos los gobiernos deben asumir "sin cortapisas los estándares de transparencia y rendición de cuentas", ya que no se trata sólo de adquirir un compromiso voluntario del gobernante, por el contrario, se trata del cumplimiento de obligaciones constitucionales que, si bien existen desde hace siglos, recientemente fueron reforzadas.
En efecto, el Diario Oficial de la Federación del 7 de mayo del 2008 indica que se reformaron los artículos 73, 74 y 122 de la Constitución relativos al proceso de presupuestación, rendición de cuentas públicas y contabilidad gubernamental, a los que se deben ceñir los gobiernos federales y locales.
En un artículo transitorio de esa reforma se señala que los estados deberían adecuar sus constituciones y leyes a estas disposiciones a más tardar un año después de esas reformas.
Más que un llamado a un "compromiso con la transparencia" debería tratarse del inicio de una cruzada nacional por el cumplimiento de lo dispuesto en las...
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