Sé el duende de tu cocina

AutorClaudia Mendoza

La mejor disposición para hacer de tu cocina una fábrica de regalos, los ingredientes suficientes, un buen empaque, listones y tarjetas personalizadas harán que esta Navidad le ayudes a Santa con algunos de sus dulces regalos.

No necesitas entrar por la chimenea, algunos dulces podrás entregarlos en las posadas del trabajo, en las reuniones con los amigos o cuando visites a la familia.

"Debes buscar un empaque económico, como cajas de acetato o la tradicional bolsa de celofán con un buen arreglo o decoración, o puede ser una bolsa de regalo o un plato alusivo a la fecha, y en un empaque navideño pones el toque final al decorar con un buen moño", recomienda Carmen Guardiola, de Dulce Tentación.

Los dulces hechos en casa resultan, además de económicos, deliciosos y muy valorados por quienes los reciben, y es que un rollo de guayaba, unas galletas de cacahuate y chocolate o unas nueces garapiñadas pueden ser el mejor detalle.

A la hora de seleccionar el dulce para hacer en casa debes definir la cantidad de regalos que tienes en mente, y si ésta es muy grande, opta por productos de temporada como la guayaba, pues así lograrás economizar.

"Puedes hacer el dulce de guayaba, membrillo o tejocote, que son frutas que están muy baratas por estar en temporada, también el higo o el dátil", sugiere.

Pero si sólo tienes algunos compromisos o los regalos que traes en mente requieren de mayor esfuerzo, podrás optar por preparaciones que aunque sean un poco más elevadas en costo, serán mejores opciones que un detalle comprado en una tienda.

Rollos de guayaba

8 rollos

Tiempo de elaboración: 2 horas, más 1 día de reposo

Grado de dificultad: bajo

· 3 kilos de guayaba muy madura

· 1 taza da agua

· 2 kilos de azúcar

Para el relleno:

· Cajeta (en cantidad al gusto)

· Nuez picada o coco rallado (en cantidad al gusto)

Preparación:

Cortar los extremos de las guayabas y poner a semicocer en una taza de agua a fuego medio, sin que se ablanden demasiado. Dejar enfriar. Cuando estén totalmente frías, licuar con todo y el agua.

Pasar la mezcla por un colador para obtener la pulpa que después se vaciará en un cazo de cobre o recipiente de acero. Agregar el azúcar y cocer a fuego medio.

La mezcla estará lista cuando se vea el fondo del cazo a la hora de estar revolviendo con una espátula.

Vaciar en varias charolas forradas con papel encerado y que además tengan una capa de azúcar blanca. Dejar enfriar.

Después de 24 horas, untar la superficie del dulce con una capa de...

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