Duele su partida

AutorRicardo Guerra

Sembrar por la vida amistad y amor da como cosecha lo mismo, pero multiplicado a la "n" potencia, y esto fue lo que recibió Aída Náder Hanun, quien falleció a los 33 años de edad el pasado domingo 19 de mayo.

La esposa de Abraham Hanun Safi, y mamá de Abraham, Andrés y Aída, quien falleció por un infarto cerebral, fue conocida por su amor incondicional hacia sus hijos y su familia, además de sus amistades, quienes la recuerdan por su gran entrega.

Ejemplo de ello fueron las muestras de cariño mostradas durante sus servicios funerarios el pasado domingo, en donde acompañaron a su familia en su duelo.

Ella, además era muy conocida y querida por la comunidad del Irish y Cecvac pues sus hijos estudiaban en estos colegios, además de que jugaba futbol en una liga de mamás

"Hoy entiendo el gran amor que tuvo con mis hijos, el por qué nunca se tomó una siesta, el por qué nunca les dijo no a nada; el tiempo es el recurso más valioso que tenemos, es irreemplazable y ella lo dedicó sacrificando su comodidad, siempre para sus hijos y su casa", comentó Abraham Hanun Safi, esposo de Aída.

Agregó que su historia nació como un amor a primera vista, siendo Aída una mujer llena de cualidades, muy hermosa por dentro y por fuera.

"Siempre estuvo presente, dio mucho más de lo que pedía para ella, era muy fácil hacer amistad con ella, quererla, en casa sacrificó muchas comodidades para hacer feliz a sus hijos, eso la hacía muy feliz", expresó su esposo.

Aída, quien es hija de Jesús Náder Nasralah, actual Presidente Municipal de Tampico, Tamaulipas, y de Aída Feres de Náder, no sólo mostró ese amor con su familia, sino con sus más cercanas amistades, quienes la recuerdan por su madurez, alegría y cariño incondicional.

"La admiro por su entrega y el amor que siempre le dio a Abraham, su esposo, y sus niños. ¡Marcó nuestra vida! Agradezco a la vida por ponernos en el mismo camino", comentó Valeria Treviño, amiga y comadre de Aída.

Además, Náder de Hanun será recordada por el gran apoyo que brindó en los diferentes grupos en los que pertenecía, ya sea en los equipos de futbol de mamás en los que participaba, como también en las clases de diferentes disciplinas que tomaron sus hijos.

"Fue una mujer ejemplar, admiré su amor y entrega con sus hijos, ¡La extrañaremos muchísimo!", comentó Carla Guevara, amiga de Aída y maestra de su hijo Abraham.

Y es que estas muestras y palabras de cariño no son extrañas para su familia, ya que Aída siempre estuvo presente para quien...

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