Diván Especial / Navidad rosa

AutorJosefina Leroux

Los Reyes Magos no existen, tampoco Santa Clos, nos decía Chocolate cuando éramos niñas. Chocolate era un niño pobre amigo de mi hermano que trabajaba en la gasolinera de Moliere en Polanco, una colonia de gente más o menos rica. Nosotros éramos de los intermedios aunque en ese tiempo no nos dábamos mucha cuenta.

Vivían en nuestra cuadra muchas familias judías con cuyos hijos también discutíamos porque a ellos les traía Santa Clos y a nosotros los Reyes Magos. Nuestra fe se ponía en tela de juicio desde pequeños, ante las distintas realidades de nuestros compañeros de juego.

Conformábamos un grupo heterogéneo. Nos unía la discusión de las diferencias. Había un niño italiano de la esquina que vivía en una mansión enorme que salía poco a la calle, y cuando lo hacía, una nana o chofer lo cuidaba de lejos. Los de enfrente eran todos judíos. También salían poco y cuando lo hacían era para presumir sus juguetes. Bueno, eso decíamos nosotros envidiosos por los atuendos, las bicicletas y juguetes importados que tenían. Sobre todo, después de Santa Clos. Con ellos manteníamos otro debate. "Jesús no es Dios, El todavía no viene a la tierra", alegaban los "necios".

Bugs y su hermano, el del "Huevo de Oro", era otro par de cuates de mi hermano. Un apodo muy atinado por su enorme parecido del mayor con el conejo de las caricaturas, desde grandes sus orejas hasta su forma de hablar característica. Su hermano pequeño debe ser un hombre rico hoy. Desde chiquito le gustaba el comercio y no se intimidaba de vender huevos y chorizo a todas las mamás.

Coral y su hermano vivían en el edificio de mi abuelita al lado de mi casa, eran hijos de españoles. A ellos también les traían regalos los Santos Reyes. A Coral le gustaba mi primo Chelín, él decía que era su novia.

A Chocolate le decían así por el color de su piel. No era de la colonia, pero escapaba en su tiempo libre a jugar o pelear con nosotros. Es un invento de los ricos, sostenía, "por eso a mí nunca me han traído juguetes".

Es que es un niño malo, justificaba mi nana. Es que no cree, decía mi mamá. A los niños que no creen en los Reyes Magos no les...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR