Disfrutan grandes su paso por la Uni

AutorLuis López

En la universidad se viven los mejores años, pero no todos los viven a la misma edad.

La primera generación del Programa Universidad para los Mayores, de la UANL, recibió ayer su título de graduación.

El grupo de adultos de 55 años de edad o más, conformado por 26 egresados, de los cuales 18 son mujeres y 8 son hombres, comenzó sus estudios de cuatro semestres de duración en agosto de 2011.

Aunque algunos ya contaban con títulos profesionales, para la mayoría, recibir el título del diplomado de dos años fue su primera experiencia en las aulas universitarias.

Sara Ledezma Macías, quien no había estudiado una carrera profesional, pero sí prepa, afirmó que la amistad de los compañeros trascendió el salón de clases.

"No fuimos compañeros, fuimos hermanos", enfatizó. "Hemos hecho una hermandad que no vamos a romper nunca".

Este título es solamente el principio de sus estudios académicos, pues la empleada de una empresa de fabricación de chorizo de champiñón, de 58 años, planea continuar su formación universitaria en enero de 2014.

"Yo no me voy", expresó Ledezma Macías, "yo me inscribo en la Facultad de Agronomía (de la UANL) y voy a sacar la carrera de Ingeniero en Industrias Alimentarias".

El plan de estudios ofrece 20 materias de temas diversos, como Computación, Historia de México, Iniciación a la Interpretación Teatral, Gestión del Ahorro Personal y Familiar y Personajes de la Ciencia.

Además, los estudiantes participan en clubes y actividades como coro, bailoterapia y círculo de lectura.

María Cristina Ramírez Aguilar expresó en su discurso como representante de su generación el gusto por aprender sobre temas de relevancia actual, como salud y tecnología.

"Nos actualizaron en información tecnológica a través de la computación, convirtiéndonos en cibernautas activos", dijo con una sonrisa la mujer de 67 años.

Ramírez Aguilar, Licenciada en Trabajo Social por la UANL, compartió después la alegría de pisar de nuevo las aulas de su Alma Mater como estudiante.

"Andar por los pasillos, contagiarte de la energía de los jóvenes, hacer las tareas, trabajar en equipo, fueron experiencias muy gratificantes", expresó. "La vida estudiantil es de las mejores etapas de la vida".

Ni la vida estudiantil ni la contribución al desarrollo social tienen límite de edad, destacó César Gutiérrez Bencomo, asesor de proyectos agropecuarios.

"Independientemente de la edad que tengas", dijo, "puedes seguirte preparando para beneficio personal, familiar, y para hacer...

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