Descartan 'bomba' poblacional

AutorDaniel de la Fuente

El director desde 1979 del Instituto Nacional de Estudios Demográficos, en París, Hervé Le Bras tiene muy claro el momento en que las autoridades comenzaron a ubicar el aspecto poblacional como un problema que se debía "frenar": febrero de 1662, Londres, cuando aparece el primer libro sobre estadística s de habitantes.

Esto hubiera sido loable, a decir de Le Bras, si no es porque la verdadera intención de esas autoridades fue justificar sus acciones de poder con base en dichas "alertas" poblacionales, e imponer así sus decisiones.

Mecanismo del poder centralizador y moderno, la aritmética política ha azuzado a las naciones pobres, sobre todo desde el final de la Guerra Fría, con el pretexto de que cada vez habrá más gente en el mundo y que la masa de pobres migrará sobre todo hacia los países del norte, desequilibrando las economías.

"Todo esto es falso", dice en entrevista el autor de "Los Límites del Planeta" (publicado en Editorial Ariel), "hay muchos mitos en torno a esto.

"Este tipo de amenazas no sólo se incrementaron tras la aparición del libro 'Bomba P' (Bomba Poblacional, 1968), de Paul Erlich, y la aparición del Club de Roma, sino porque ahora son el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional los que exigen el control demográfico dentro de las diversas demandas que hacen como condiciones para los préstamos a los países".

Le Bras estuvo hace unos días en la ciudad, donde compartió sus ideas con el público que asistió al Museo de Historia Mexicana dentro del ciclo Agitadores de Ideas, organizado por la Alianza Francesa de Monterrey y el Consejo para la Cultura de Nuevo León.

Esta presión de los organismos internacionales, explicó el investigador, no es justa, dado que no se apega a la realidad y sólo se utiliza a la población para justificar las acciones políticas sobre el hombre común.

"No hay un aumento descomunal de la población en los países pobres; tampoco se esperan grandes migraciones, porque éstas han descendido a lo largo del tiempo y, al contrario, es un derecho humano que la gente cambie de lugar de residencia. Tampoco son graves los problemas de escasez de agua, petróleo o aspectos ecológicos. Hay tiempo para reaccionar frente a ellos. Aquí el problema central es la inequitativa distribución...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR