A derribar viejos esquemas

AutorIssac Castañeda

Tal vez más que nunca, los padres han visto cómo sus obligaciones y actividades relativas a la crianza son vigentes y requeridas las 24 horas del día, los siete días de la semana, como consecuencia de la cuarentena.

Esto representa una oportunidad para unos, así como refuerza algunas conductas con tendencia a la inequidad, explica Roberto Garda, director de la organización Hombres por la Equidad A.C.

"Muchos papás pueden aprender la importancia de la intimidad, de la igualdad, de la negociación y que pueden reforzar sus vínculos", comenta.

"Si en la familia ya había, por parte del hombre, una tradición de conversar los problemas con sus hijos e hijas y negociar, eso continuará. Por el contrario, si imponían el ejercicio del autoritarismo, maltrataban, violentaban, pues seguramente continuarán así".

En lo relativo a las labores domésticas (limpieza, cuidado de la familia o alimentación), es importante que la responsabilidad no recaiga en las mujeres, consecuencia de un añejo estereotipo de género.

Así, el encierro puede derribar viejos esquemas, considera Alí Siles, sociólogo e integrante del Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG) de la UNAM.

"Si los papás se involucran en la crianza de sus hijos, en el cuidado o las tareas, no es ninguna labor extraordinaria; al contrario, es encontrarse con una posibilidad de involucrarse más, que como padres que han asumido su...

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