Que tu depa te haga ganar
| Autor | Bárbara Cardona |
Tal vez tengas en mente invertir en un departamento, pero no precisamente para vivir en él.
La inversión en inmuebles es una forma de recibir un ingreso extra en el bolsillo.
Pero comprar un departamento para ponerlo en arrendamiento y recibir mensualmente una renta no es la única opción.
Existen diferentes formas de hacerlo.
Una es el crowfunding.
Algunas empresas permiten invertir una cantidad pequeña para ser dueño de cierto porcentaje de un proyecto.
"Compramos a un precio barato y sabemos más o menos cuánto cuesta la construcción, cuánto cuesta un terreno.
"Con los desarrolladores les compramos departamentos en preventa y volvemos accesible la inversión inmobiliaria para un público que antes no tenía esta accesibilidad", dice David Agmon, fundador y director general de Inverspot.
Es decir, una persona para adquirir una propiedad tiene que pagar de uno a dos millones de pesos en preventa.
Pero al entrar a un crowfunding inmobiliario lo que hace es invertir desde 50 mil pesos en proyectos en preventa.
Los complejos que están bajo este concepto se revisan antes, para saber quién es el desarrollador y en qué zona se ubican.
Se llega a una negociación, se ven los avances de obra y se va informando a los inversionistas sobre cómo va la obra.
"Cuando está listo lo vendemos el departamento y obtenemos la utilidad gracias a ese diferencial entre el precio de compra y el precio de venta.
"Le debe generar al menos al inversionista el 20 por ciento anual", asegura Agmon.
De acuerdo con el director general de Inverspot, este tipo de concepto permite que las personas puedan diversificar.
"En vez de tener que comprar un departamento y que ellos tengan que meter 2 millones de pesos en un sólo departamento, esos 2 millones de pesos lo pueden dividir en seis o siete proyectos de inversión.
"Entonces si una obra se llegara a atrasar o si un departamento se tarda un poquito más en vender, pues no les pega directamente, porque tienen otras cinco obras trabajando para ellos", señala Agmon.
Este tipo de concepto va dirigido a dos segmentos.
El primero es el inversionista experimentado, que conoce la industria y cuenta con un capital más fuerte.
"Le ahorramos mucho tiempo de trabajo en investigación, le ahorramos mucho tiempo de trabajo en la parte legal, nos convertimos en su bróker de inversión", asegura Agmon.
El crowfunding también funciona para el inversionista que tiene un capital reservado, que no cuenta con experiencia en el sector inmobiliario y que...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba