Se deja querer en su tierra

AutorErnesto Núñez

EL NORTE/Enviado

JIQUILPAN, MICHOACAN.- "Ya nos contestó el Presidente". Con esta noticia, el equipo de campaña de Cuauhtémoc Cárdenas salió ayer del hotel Mansión de Cupatitzio, en Uruapan, para concluir su gira de tres días en Michoacán.

Ernesto Zedillo calificó de "irreflexivos" a quienes -como Cárdenas- proponen desaparecer la Policía Federal Preventiva y eso casi enorgullece al candidato perredista, que no pierde ocasión para presumir la anécdota en un mitin en el municipio de Chavinda -su segunda parada del día-. Eso, dicen sus colaboradores, es una señal de que Cárdenas vuelve a incomodar al Gobierno.

Después de tres días en Michoacán, 18 mítines y saludos en 10 pueblos, el ambiente en el equipo de esta campaña parece inmejorable. De la frase irónica "no hay que subestimar al ingeniero", que pronunció Francisco Labastida en abril, Cárdenas ha pasado a ser el blanco del discurso presidencial.

El candidato habla de su confianza, se ve envalentonado, critica duro a Vicente Fox, revira contra Labastida, se mete con Zedillo, reprocha a la Canciller Rosario Green la muerte de cientos de mexicanos en la frontera norte, se erige como el único candidato con proyecto político y sonríe durante todo el viaje.

Se deja querer en su tierra, que en este fin de semana ha refrendado su cardenismo en concentración nutrida, desde la comunidad indígena de Erongarícuaro, hasta la ciudad de Sahuayo gobernada por el PAN.

La marcha que encabezó en Jiquilpan, la ciudad natal del General Lázaro Cárdenas, no hace sino reforzar su optimismo.

Del brazo de...

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