Dale remedio

AutorStaff

Es inevitable que algunas actividades físicas nos provoquen malestares o dolores luego de practicarlas.

Ya sea por correr, levantar peso o por un simple calambre, puedes presentar molestias que incluso te impidan continuar con tus actividades normales.

Si no se trata lesiones o enfermedades evidentes, existen remedios simples que pueden ayudarte a aliviar estos dolores.

Eso sí, toma en cuenta que el dolor o la molestia debe aminorar sensiblemente al aplicarlos.

Si no sanan pronto o su intensidad se hace notoria, debes acudir con tu médico para que te valore y diagnostique un tratamiento adecuado.

Aquí te presentamos algunas soluciones a molestias o lesiones leves.

Dolor en la espalda baja

Remedio: Yoga

-Actividades como correr, el ciclismo y el golf hacen presión en la columna vertebral, lo que puede provocar dolores de espalda.

Para aliviarlos, puedes practicar yoga.

Un estudio de "Archives of Internal Medicine" indicó que el 60 por ciento de las personas que practicaron yoga por 75 minutos a la semana reportaron menos dolor en la espalda baja después de tres meses.

Enfócate en la meditación y el estiramiento al p[racticarlo.

Ampollas

Remedio: hierbas

-Pueden ser muy comunes si no usas protección mientras cargas pesas o cuando tus tenis te quedan ajustados o ya están muy deteriorados.

Cuando aplicas vaselina en tus heridas limitas la fricción, pero no reparas el tejido.

Para ayudar a sanarlas, puedes frotar ungüento de caléndula o manzanilla -plantas medicinales- y cubrirlas con un vendaje limpio y seco.

Las propiedades antimicrobianas de la salvia reducen la inflamación y también aceleran la recuperación.

Codo de tenista

Remedio: Hielo y calor

-Esta lesión no se limita únicamente a los jugadores de tenis, de golf, beisbol o en la natación. Igual puede aparecen en personas que realicen actividades y tareas cotidianas que involucren un esfuerzo repetitivo del codo.

Para solucionarla, coloca varios cubitos de hielo en una bolsa de plástico y aplica en la zona adolorida para reducir la inflamación. Esto durante las primeras horas de dolor.

Durante las siguientes horas, hierve dos tazas de agua con tres cucharadas de sal. Cuando llegue al punto de ebullición, apaga y deja enfriar un poco. Con esa solución debes remojar un paño y ponerlo en la zona adolorida. Para la recuperación adecuada, debes consumir alimentos que contengan sílice, magnesio, flúor y calcio.

DOLOR MUSCULAR

Remedio: ¡a la tina!

-El dolor que se produce por excederse al hacer...

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