Creando una obra maestra
| Autor | Axel Romero |
Fundado en 1984, Naughty Dog se ha convertido en uno de los estudios de videojuegos más relevantes en la industria al crear franquicias como Crash Bandicoot, Jak and Daxter y más recientemente, Uncharted y The Last of Us.
Hace unas semanas salió a la venta The Last of Us Part II, una secuela muy esperada por los seguidores del juego original publicado en 2013, pues promete ser una experiencia intensa y llena de emociones al desarrollarse en un mundo post apocalíptico en el que Ellie, la protagonista, realiza un viaje en busca de venganza.
Si bien, la narrativa es algo por lo que destacan los juegos modernos de Naughty Dog, hay varias innovaciones tecnológicas detrás de la última obra creada por el estudio ubicado en Santa Mónica, California.
Para saber más sobre el desarrollo del juego, participamos en una sesión de preguntas y respuestas con Anthony Newman, codirector de The Last of Us Part II.
DECISIONES, DECISIONES, DECISIONES...
Mientras Neil Druckmann, director del juego, desarrollaba la historia, Newman estuvo involucrado en varios aspectos relacionados a la jugabilidad.
Una de sus principales misiones fue proveer a los gamers de elementos que les permitieran escoger. Esto va desde las armas que Ellie usa y las mejoras que fabrica con piezas que encuentra en el camino, hasta la elección de las rutas de exploración, que podrían llevar a los jugadores a descubrir varios secretos a cambio de tener que lidiar con decenas de enemigos acechando el área.
Cada decisión tiene grandes repercusiones, incluso matar a un enemigo.
Ellie se enfrentará a dos facciones de sobrevivientes nuevas. Una de ellas se llama Washington Libre y Fuerte (WLF), una organización preparada militarmente en la que sus integrantes, conocidos como "Lobos", cuentan con binomios caninos que siguen al jugador mientras se oculta.
Si el can detecta una esencia extraña, se dirigirá hasta la fuente que la origina. Correr es una opción, causar una distracción es otra, pero si el jugador decide eliminarlo, el dueño le gritará el nombre del perro, cambiará su semblante, su expresión facial e inmediatamente arremeterá con violencia.
Las reacciones de los personajes conforme se desarrollan el combate y la exploración fueron sumamente detalladas, a tal nivel que puede creerse que son algo más que simple inteligencia artificial.
"Fue un proceso que requirió el esfuerzo de todos en el estudio y creo que cada persona está muy comprometida con su arte. Desde la persona que hace el...
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