Crean cuentos asilo
| Autor | Daniel Santiago |
Mientras el mundo se maravilla con la capacidad de registrar velozmente vida y recuerdos en un celular, para los adultos mayores del asilo Sagrado Corazón de Jesús bastan papel y pluma para disfrutar el presente de forma extraordinaria.
Desde hace un mes, la Fundación El Mundo Escribe imparte en espacios para personas de la tercera y cuarta edad el taller "Hoy cuento y mañana también", como una manera de llevar recreación y reactivar la memoria con ejercicios de escritura.
Con la ayuda de instructoras que han sido capacitadas para esta actividad, algunas de ellas psicólogas, hombres y mujeres mayores de 60 años salen de la cotidianeidad de una casa de retiro para plasmar en palabras anécdotas, recuerdos y peripecias de la vida.
"Nací el 5 de febrero de 1929, en Cadereyta Jiménez, Nuevo León. Soy un chavo de 90 años", dice Roberto de la Garza García, provocando la risa de sus compañeros del asilo, antes de comenzar a leerles al micrófono el texto que acaba de terminar de escribir.
"Me levanto como a las seis de la mañana. Llega la enfermera y levanta a mi esposa para bañarla, luego le pone la ropa, la peina. Coloco la silla de ruedas y ella se sienta, la llevo a la capilla para oír misa".
Ángeles Favela, fundadora de El Mundo Escribe, dice que no se trata de entrar en situaciones de nostalgia.
"Es vivir el presente, tal como están ahorita, y tener esa oportunidad de reescribir la vida", expresa.
Los ejercicios son sencillos, pero significativos.
Algunos consisten en pensar en algún elogio que hayan recibido en su vida, un viaje singular o los detalles del día a día. Los objetivos son despertar la memoria, ejercitar la habilidad psicomotriz y ver la riqueza que tiene cada momento de la existencia.
"Las personas generalmente a lo largo de su vida han recibido algún elogio por algo que hacían bien", explica Favela. " Por ejemplo, 'siempre me dijeron que tejía de maravilla' o que 'cocinaba la mejor paella', o que 'cantaba muy bien'.
"Es recordar un poco esas habilidades por las que fueron reconocidos, y es una sesión muy emotiva, porque con algo que ellos recuerdan sienten ese empoderamiento de saber que lo hicieron o lo hacen muy bien".
Fundación El Mundo Escribe está dedicada a acercar la escritura como herramienta de vida a personas en situación vulnerable. El año pasado iniciaron un proyecto en el que mujeres sobrevivientes de cáncer de mama registraron las alegrías y tristezas que les trajo el padecimiento.
En aquella ocasión los textos...
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