Clavados en jugar

AutorVania Arzola

Además de ser fieles amigos, olfatear todo lo que ven o babear, los perros también practican clavados y saltos de altura.

Esa es otra de sus tantas cualidades que, de existir algunos Juegos Olímpicos Perrunos, seguro atraería las miradas de muchas personas.

CALENTAMIENTO

Antes de zambullirse, los perros juegan un poco con la pelota, persiguen el frisbee, dan la pata y realizan todo tipo de trucos.

Después, sigue el baño en grupo, es decir, todos se meten a la alberca, para mojarse un poco y quitarse el calor.

Una vez afuera, se divierten otro rato, se secan y practican uno por uno cierta actividad: saltos, nado, traer cosas o sólo acondicionamiento físico.

¡AL AGUA!

Hay dos tipos de clavados, en ambos tienen dos oportunidades y el objetivo es hacer el brinco más largo posible sin ayuda.

De longitud. El perro corre toda la plataforma y se impulsa lo suficiente para saltar. Para hacerlo más divertido, se le lanza un juguete al aire, aunque al final no importa si lo toma. En Estados Unidos hay varias competencias en donde las categorías están determinadas por el tamaño del perrito y los rangos de distancia.

De altura. A diferencia del anterior, aquí se cuelga un objeto (juguete, mordedor, pelota o frisbee) de un brazo metálico a determinada distancia y altura para que el perro lo agarre. Así, su impulso es hacia arriba, no hacia adelante. El clavado sólo es válido si, al caer, lleva el objeto o lo tira al agua.

SALTO A LA FAMA

Como auténticos atletas, estos peludos practican dos veces a la semana en la alberca de la Federación Canófila Mexicana.

Sin embargo, para Fullet no siempre fue así, pues...

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