Cita con el Doctor/ Un dolor que 'quema'

AutorSilvia Ruano

Si usted o alguno de sus seres queridos ha experimentado un dolor que 'quema', es hora de ponerle atención: le está avisando de un problema neuronal y quizá sea también el comunicado para enterarle de la presencia de otro padecimiento. El neurólogo Enrique J. Carrazana, profesor asociado de la Escuela de Medicina de la Universidad de Miami y experto del Centro Neurológico del Sur de la Florida, le explica aquí de qué se trata

Al dolor se le reconoce como un enemigo a vencer, pero visto desde otra perspectiva, en algunos casos también puede ser un amigo, cuando le avisa al cuerpo que algo anda mal.

Este es el caso del llamado dolor neuropático, que quienes lo sufren reconocen fácilmente como un dolor que "quema".

Visto de una manera sencilla, el proceso del dolor implica el envío de un mensaje al cerebro a través de los nervios; se recibe el comunicado y aparece el síntoma.

Pero en el caso del neuropático sucede que los nervios o sus terminaciones son los que se afectan y "sufren" de manera que envían un mensaje inexistente: el nervio "decide" decir que hay dolor, pero en realidad no hay tal.

Entonces la persona experimenta una especie de quemadura constante y muy molesta, acompañada de una especie de rayos eléctricos que puede mantenerse constante hasta 24 horas con intervalos durante el día dependiendo del origen del problema.

Se sabe que este tipo de dolor tan molesto y que afecta en muchos sentidos la vida del paciente -psicológico, limita actividad cotidiana, relaciones de pareja, hábitos de sueño- está relacionado con problemas inmunológicos.

Esto ocurre con brotes de herpes en personas mayores cuando su sistema inmune se deprime, en gente que padece por VIH, y con otros trastornos o enfermedades crónicas como la diabetes, por mencionar algunos casos.

Se destruyen las terminales de los nervios, se inflaman los ganglios y la médula espinal y el mensajero, en este caso el nervio, sufre y su angustia se refleja como una quemazón, un "dermatoma" que implica la experimentación del síntoma pero sin ninguna prueba visual de su presencia.

Existen varios tipos de neuropatía o dolor neuropático; entre los cuales el más frecuentes suele ser la neuropatía periferal, cuando los nervios distales se gastan y dañan debido a padecimientos metabólicos como la diabetes, hipotiroidismo, uremias y la presencia de toxinas presentes en medicamentos como los que se emplean en quimioterapia o para tratar al VIH.

Entre quienes padecen por este tipo de dolor es...

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