Cierran ductos ...y refinerías están paradas

AutorEL NORTE / STAFF

MÉXICO.- Para combatir el robo de combustibles, el Gobierno federal cerró los ductos de Pemex e inició la distribución a través de pipas, desencadenando un desabasto en Estados del Bajío, Occidente y el Centro del País.

A este desabasto se suma que cuatro de las seis refinerías de la petrolera no están en operación y que Pemex señaló ayer que "en el corto plazo" no podrá reabrir los ductos por sabotajes de huachicoleros.

Actualmente, sólo las instalaciones de Cadereyta y Tula procesan 90 y 120 mil barriles diarios, respectivamente.

Las refinerías de Madero y Minatitlán, a su vez, quedaron inactivas en el 2018 por mantenimiento iniciado en el sexenio pasado.

Y ahora pararon Salamanca y Salina Cruz, según fuentes allegadas a Pemex.

El nuevo Gobierno heredó un nivel crítico en la refinación: a noviembre pasado, sólo el 32.1 por ciento de la capacidad se usaba para producir gasolinas.

Salamanca estaba en 35.1 por ciento, Tula en 44.1, Cadereyta en 42.3 y Salina Cruz arriba del 50 por ciento.

Con esta vulnerabilidad se echó a andar la estrategia contra el huachicoleo, basada en el abastecimiento terrestre del combustible, ya que los oleoductos no han podido ser reactivados.

Pemex intentó ayer abrir un tramo de Salamanca-León y tuvo que cerrarlo en menos de dos horas, informó el director de la petrolera, Octavio Romero, a los Gobernadores de Guanajuato, Diego Sinhue, del PAN, y de Jalisco, Enrique Alfaro, de MC.

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