Carcajadas para todos

AutorRodolfo G. Zubieta

Gracias a Jean-Ralphio Saperstein, un chico emprendedor con un coeficiente intelectual bajísimo, pero con muchas ganas de sobresalir, el actor Ben Schwartz logró, finalmente, colarse en la cultura pop.

Su personaje en la serie Parks and Recreation atrajó la atención no sólo del público, sino de críticos y productores por igual, quienes decidieron apostar por aquel comediante judío oriundo del Bronx.

Ese estilo de humor que manejó el neoyorquino en la serie creada por Greg Daniels y Michael Schur, cargado de acidez pero para toda la familia, le ha otorgado un lugar muy especial en Hollywood.

"Siempre he jugado a la segura en el escenario, quizá es porque crecí como un chico judío, en el Bronx. La verdad es que siempre he tratado de hacer feliz a las personas, y no quiero ofender a nadie.

"Sin embargo, cuando hago cosas en vivo, improviso mucho, y una de las claves de ese estilo de comedia es que no tienes que pensar en nada: lo que te llega a la cabeza en el momento es lo que sacas en escena... Y eso, a veces, podrá afectar a algunas personas", reflexiona Schwartz en entrevista.

Su simpatía, personalidad y su físico tan peculiar, han ayudado a Benjamin (su nombre real) a forjarse un estilo actoral único, el cual ha mantenido desde que realizaba sus propios cortos y webseries independientes.

Escritor, director y productor autodidacta, acostumbra mezclar torpeza y "pastelazo" con una pizca de crítica social, humor negro y un gran manejo de temas mundanos, algo que aprendió en la improvisación.

"Siempre trato de que mi comedia sea muy segura, muy cuidada, muy pensada, porque nunca me ha gustado ofender a los demás. Creo que eso es algo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR