'Hemos caído en la tecnolatría'
| Autor | Claudia Guerra |
Para ser humanos hay que ser terrestres. Es decir, señala el poeta Gonzalo Rojas con su genialidad y humildad infinitas, hay que estar pegados a la tierra. Ser más humano implica ser más humilde, dejar de ser tan abusivamente presuntuoso con la adoración a la máquina: la llamada "tecnolatría".
El poeta chileno, de 82 años, considerado uno de los poetas mayores de Hispanoamérica, presenta hoy su forma de pensar y sus reflexiones, en su primer encuentro con los regiomontanos, a las 20:00 horas, en el Museo de Arte Contemporáneo.
"Creo que para ser humano hay que ser terrestre, hay que estar pegado a la tierra y sentir la imantación de la tierra. México tiene esa gracia prodigiosa, que tú te sientes atado a la tierra", señala tranquilamente en la sala de consejo del museo un día antes de su presentación.
Rojas llega a la Ciudad después de haber sido invitado, al menos dos ocasiones, para participar en el Encuentro Internacional de Escritores, y en el Festival Cultural Barrio Antiguo, que ahora lo trae en conjunto con el municipio de Monterrey, Conarte, Marco, el FCE y el Hotel Howard Johnson.
"Mientras somos más humanos somos más humildes, no tenemos que ser tan abusivamente presuntuosos por unas cuantas máquinas que hemos sido capaces de inventar. Hemos ido adorando la máquina o la técnica, que, claro, son prodigiosas, y hemos caído en la tecnocracia, más bien en la tecnolatría y en la adoración de eso".
Palabra vs. tecnología.
En este mundo en el que pareciera que la memoria que manda es la de la computadora, el autor de "Antología del aire" señala que la misión de la palabra es la de siempre: permanecer.
"La palabra es como el pensamiento, son hijos del asombro. La palabra no va a perecer, no estoy dictaminando nada nuevo, ya se sabe, ya se decía ayer, con imaginación, sensibilidad y palabra. La palabra a su vez es el más peligroso de los bienes", comenta mientras se coloca en la cabeza la boina ya clásica de su personalidad.
"No creo que la palabra vaya a ser cancelada en nombre de estos prodigios tecnológicos. No, la poesía se hace con silencio, además, el que no entiende lo que es el silencio no entiende nada, el que no entiende lo que es el callamiento no entiende nada; inventemos la palabra si no existe, callamiento. Hay que saber callarse y callar y demorarse".
Ese es el mensaje a los jóvenes, no andar con prisas, ¿para qué?, ¿qué es eso de la...
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