Caen 4 y los ligan con el decapitado
| Autor | Mario Alberto Álvarez |
Cuatro jóvenes que tendrían implicación en el crimen de un hombre que fue decapitado y cuyo cuerpo tiraron en El Uro fueron capturados ayer por agentes de la Policía Ministerial.
Una fuente de la Agencia Estatal de Investigaciones informó que hasta anoche al menos dos de los detenidos ya habían confesado su participación en el homicidio.
Agregó que no se ha precisado si hay uno o dos más implicados en los hechos, los cuales se mantenían prófugos.
Los agentes buscaban ayer las armas con las que fue asesinado y decapitado Antonio de los Santos Arredondo, de 31 años, quien también se hacía llamar Alberto González Martínez y tenía antecedentes por robos.
Los ministeriales también trataban de encontrar la cabeza de la víctima en Santiago, donde aseguraban los detenidos que fue tirada.
De los cuatro detenidos, precisó la fuente, a dos no se les había comprobado su posible relación con el crimen. La identidad de los detenidos no fue revelada por la autoridad.
El móvil de los hechos, según trascendió, habría sido porque los presuntos asesinos aseguraban que De los Santos Arredondo les había cometido un robo tipo cristalazo, aunque esa versión oficialmente no se ha confirmado.
Lo quisieron amedrentar golpeándolo e hiriéndolo, pero supuestamente se les pasó la mano y luego planearon y decidieron decapitarlo para tratar de despistar a la Policía Ministerial, simulando un crimen de la delincuencia organizada.
El cuerpo de De los Santos Arredondo fue localizado la mañana del martes en una finca abandonada ubicada en el Arroyo La Chueca y Camino a la Presita, en El Uro, cerca de los límites con Los Cristales, en el sur de la Ciudad.
Su cadáver, sin cabeza, estaba envuelto en un cobertor, con las manos sujetas con cinta adhesiva color gris y con una camisa y sudadera atadas a las muñecas.
Los pies los tenía sujetos con alambre y la causa de la muerte se determinó que fue por una de las heridas con arma blanca que presentaba en el abdomen; otras más las tenía en el pecho.
Por sus huellas dactilares fue como se logró la identificación extraoficial de la víctima.
La fuente de la AEI explicó que por una evidencia, de la que no dio detalles, que se recabó en el lugar donde se encontró el cuerpo, fue como lograron seguir una pista para identificar a los presuntos asesinos.
Primero detuvieron a un joven en un lugar del que no se precisó la ubicación y éste delató a sus amigos que estaban en el departamento 40 del edificio 19-E, de los Condominios Constitución.
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