Son buenos vecinos

AutorBárbara Cardona

El movimiento de autos y peatones en las calles del Centro de Monterrey hace que en ocasiones sea poco probable prestar atención a los edificios que hay alrededor.

Por ejemplo, ¿te has percatado que el Templo de Nuestra Señora de Dolores está justo al lado del Templo del Perpetuo Socorro?

El primero se concluyó en 1909, por lo que este año se cumplen 110 de su construcción.

"Está elaborado con materiales constructivos regionales, como el sillar de caliche y el ladrillo de milpa.

"Al exterior es sobrio, pero tiene detalles neobarrocos y neoclásicos", explica Selene Velázquez, restauradora de Restáurika.

Entre sus características se encuentran los 4 mil metros cuadrados de pintura mural.

"La cúpula está reforzada con acero y aligerada con ollas de barro, la fusión de los sistemas constructivos la hacen única hasta la fecha", dice Velázquez.

Además, cuenta con aplicaciones academicistas en sus cornisas y molduras.

La ventana del coro, que se encuentra arriba de la entrada principal, es un arco conopial, con un aire goticista.

"Es probablemente el último edificio de técnica constructiva vernácula que se hizo con el mayor refinamiento", comenta el arquitecto Juan Manuel Casas.

La cantidad de feligreses en la zona a mediados del siglo 20 hizo que se construyera al lado el Templo del Perpetuo Socorro.

"Ahora estamos acostumbrados a ver el espacio semi vacío y con muy pocos vecinos, sólo vemos los...

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