Desde Buenos Aires... / Mucho, poquito y nada

AutorRodrigo H. Bigliani

Año nuevo, vida nueva. Eso es lo que parecen haber dicho los dirigentes en tres de los cinco clubes "grandes" de la Argentina, tal es el caso de River, Independiente y Racing que le han dado la bienvenida al 2004 con la designación de nuevos directores técnicos.

Si uno quisiera analizar las razones particulares que dieron origen a cada una de las contrataciones, podría detectar en forma simultánea, similitudes y diferencias, decisiones inteligentes y decisiones antojadizas (también llamadas caprichosas), lo que permite inferir que ciertos dirigentes conducen el destino del club que presiden según el sentimiento del hincha, y disfrazan esa imposición expresa, bajo el discurso trillado de "interpretamos el deseo de la gente". Basta de mentira: hacen lo que la gente les exige porque se les ha acabado el crédito y la autoridad.

Existen en cambio otras conducciones que, por momentos, logran instalar la idea de un proyecto claro, sustentado en una política coherente y ratificada mediante decisiones acordes a esa pauta; pero en ocasiones y también debido a la falta de resultados, terminan por redefinir el proyecto según les convenga y, de este modo, bastardean y contradicen el pensar inicial.

Por supuesto, tampoco faltan aquellas instituciones que se gestionan como empresas y que, dada su finalidad lucrativa manifiesta, mantienen sus pautas de gestión, y designan a sus entrenadores sólo persiguiendo generar impacto a partir de la imprevisibilidad. Pareciera que la primera motivación es ridiculizar los rumores de "radio pasillo" que circulan previo al nombramiento y terminan por elegir al candidato menos pensado con tal de no convalidar aquellos rumores.

El Club Atlético Independiente fue a lo seguro, a lo que el hincha pedía y recurrió a la figura emblemática de José Omar Pastoriza, el "Pato", con quien los diablos de Avellaneda lograron sus mayores conquistas. Sensatez o demagogia... mmmh..

Por su parte las autoridades de River Plate que no veían, en el pasado cercano, la necesidad de inclinarse por entrenadores con pasado millonario (argumento empleado a instancias de contratar al ahora saliente Manuel Pellegrini), a partir de un pobre segundo semestre del año, recurrieron a la figura de Leonardo Astrada, símbolo del club y jugador con mayor cantidad de...

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