BENCHMARK / Liderazgo incompetente
| Autor | Jorge A. Meléndez Ruiz |
"El problema es Durazo. Tienen que correrlo ya".
Así comentó un amigo en un grupo de WhatsApp tras la liberación de Ovidio Guzmán después de que el narco sitiara Culiacán y doblegara al gobierno.
Mmmmm. Pues sí, pero no.
Claramente el dizque operativo para capturar al hijo del Chapo demuestra ineptitud total. Y es que en la política, los negocios y la vida, a mayor importancia del objetivo que se persigue, mejor tiene que ser el plan y su ejecución.
Un buen plan cumple, por lo menos, 5 requisitos:
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Tiene objetivos bien definidos.
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Cuenta con los recursos para implementarse.
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Contempla acciones detalladas, calendarizadas y con responsables.
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Identifica contingencias.
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Cuenta con mecanismos de corrección.
Apúntelos, seguro le sirven en su próximo proyecto. Pero OJO, son consejos de kínder. Quizá quitar a Durazo ayude, pero no basta. Para nada. El problema está un poco más arriba en el organigrama...
Le platico que en marzo del 2018 conviví con AMLO un par de horas en un grupo de 5 personas. Ahí, en corto comentó que el problema que más le preocupaba era el de la inseguridad.
Su preocupación estaba totalmente justificada, pero sus acciones no checan. ¿No me cree? Vea en nuestros sitios el intercambio de Andrés Manuel con el periodista de Reforma. Imperdible.
Es una locura que tristemente se repite todas las semanas: evasión, etiquetas, ataques, cero análisis y, claro, otros datos.
Pero quizá lo más preocupante es que López Obrador repetitivamente defienda a un gobierno "humanista que no agrede al pueblo".
Perdón, con todo respeto. En sus orígenes etimológicos, gobierno significa "pilotear un barco". Y la enciclopedia Columbia lo define como: "El grupo social que emite y hace que se respeten las leyes".
O sea, el gobierno mantiene el estado de derecho.
Pues la semana pasada en Culiacán el narco fue gobierno. Y no sólo ahí. Regiones enteras son gobernadas por el crimen. Hace un par de años un empresario menonita me platicó en Cuauhtémoc, Chihuahua, cómo recibió una llamada un día después del secuestro y ejecución de su hijo de 19 años.
"Don Fulano. Fueron elementos rijosos. Ya lidiamos con ellos y no están con nosotros. Le ofrecemos una disculpa".
¿Ya adivinó quién llamó, verdad? El jefe de la plaza. Uffff.
El narcogobierno no tiene que ser tan dramático. Ayer publicamos en nuestros diarios la nota cómo empresarios evaden transportar sus mercancías por carreteras mexicanas haciendo "exportaciones temporales" para transitar por Estados...
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