Su arte se ve y se toca

AutorDalia Gutiérrez

Durante la última década, el escultor Héctor Olivares dedicó una parte de su carrera a plasmar recuerdos de la infancia y sus reflexiones sobre la vida.

Ahora decidió poner el punto final a esta etapa con la exposición "10 años. Muestra ontológica", inaugurada anoche en el Museo Metropolitano de Monterrey.

La travesía comenzó cuando recibió el premio de la Cuarta Reseña de Artes Plásticas de la UANL en 2007, por "País de corral", pieza principal e impulsora de las demás obras.

"A través de estos 10 años la he retomado, reavivado, editado, agregado y esto es lo que concluye en este momento", compartió el artista originario de Reynosa. "Si bien no es el cierre de mi carrera, sí es el cierre de una época que quise plasmar".

En esta muestra, que permanecerá hasta principios de octubre, se exhiben alrededor de 70 piezas, menos de una tercera parte del trabajo completo.

A diferencia de casi la totalidad de las esculturas, éstas no sólo pueden ser contempladas con la vista, también pueden sentirse a través del tacto.

La mayoría evoca las remembranzas y añoranzas del pasado que de alguna forma, despiertan en cualquiera que lo vea la memoria de estos juegos que acostumbraba en su niñez.

"Si bien son mis recuerdos, son mis vivencias de la infancia, estoy seguro que también son los recuerdos de todos", explicó el también catedrático de este arte en la UANL y la UDEM.

"No sólo es mi vida, son mis hermanos, mis amigos, mis familiares, todas las...

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