Aprenden a trabajar y a convivir

AutorFélix Barrón

En esta ocasión, la campana Vox Veritatis de la UDEM, que se toca cada vez que un alumno termina sus estudios profesionales, fue tocada de una forma muy entusiasta.

Once estudiantes del Programa de Integración Social y Educativa (PISYE), generación 2007-2011, terminaron sus estudios después de cuatro años, con la ceremonia de graduación celebrada el jueves en el campus.

Este programa permite a jóvenes con discapacidad intelectual, retraso mental, síndrome Down, parálisis cerebral o autismo, aprender herramientas que les permitan integrarse a la sociedad.

"Estoy muy emocionada, y pues a seguirle a ver qué pasa", señaló Gladys Flores Meza, de 21 años, ex alumna del programa, "les ayudé a mis compañeros a que no se detuvieran en las clases".

Para su papá, Rodrigo Flores, fue trascendental que su hija, quien ya tiene trabajo en un restaurante de comida rápida, tuviera la oportunidad de participar en el programa.

"Ella era muy introvertida, no tenía una vida social, no tenía amistades, al llegar aquí y como también muchos de los compañeros dependían de ella, le ayudó bastante a tener seguridad", señala Flores.

Para Sanjuana Moreno Rivera, quien también trabaja en un restaurante de comida rápida, lo que más le gustó durante los ocho semestres que dura el programa fueron las clases de creatividad.

"Me siento bien y estoy muy feliz con la graduación", dijo la ex alumna de 19 años, "me gustó mucho las clases de música y el baile porque me gusta bailar mucho".

Felipa Rivera, su mamá, dijo estar contenta por los conocimientos...

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