Apoyan mexicanas a niños relegados

AutorAndrea Menchaca

El altruismo no tiene nacionalidad.

La situación de los niños huérfanos en China que tienen una discapacidad física o intelectual tocó el corazón de tres mexicanas: Claudia Díaz, de Torreón, y Alicia Villarreal y Sandra de la Lanza, de Monterrey.

Sandra, una madre de familia de 38 años que vive en Shangái, ayuda a la Will Foundation, una casa-hogar para niños huérfanos. De no estar ahí, estos menores vivirían relegados de derechos como educación y salud debido a su discapacidad.

"Tiene 12 niños de 4 a 10 años, todos con discapacidades no tan graves, pero sí labio leporino. Dos niños no caminan, otros dos no tienen un ojo, otro no tiene una oreja. Todos son perfectamente inteligentes, pero no los aceptarían en el sistema regular de educación en China", relata en entrevista telefónica.

En el país oriental hay dos tipos de orfanatos: unos para los niños que nacen sin ningún problema físico y que son adoptables y cuentan con servicios educativos y médicos, y otros para los niños con alguna discapacidad y que están a cargo, no del gobierno, sino de instituciones privadas que reúnen fondos para ayudarlos.

"Son niños que no tienen identificación, no tienen acta de nacimiento, no tienen oportunidades en la vida. Es la cosa más horrible", expresa la mamá de una niña de 10 y dos niños de 8 y 5 años.

Cuando Sandra conoció el trabajo de Pilar Tan, fundadora de Will Foundation, en una parroquia católica a la que ambas asistían, quiso ayudarla.

Pilar había iniciado el proyecto después darse cuenta de que no había instituciones para niños de lento aprendizaje, pero que eran capaces de aprender y ser productivos, tal como J.J., un niño con labio leporino que adoptó en el 2006.

"He visto el potencial en J.J. que no muchos pueden ver", expresa Pilar en la página de la fundación. "De dejarlo solo, se convertiría en otro 'quemado', pero bajo las alas de Will, se convertirá y florecerá en un hombre que vale la pena".

Conmovida por la situación, Sandra comenzó a dedicar el tiempo que tiene en la mañana cuando sus hijos van a la escuela a ir a esta casa-hogar que queda a una hora de la...

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