Aperitivos y digestivos: Un amargo comienzo para un dulce final
| Autor | Claudia Mendoza |
Una buena botella de vino o un licor más fuerte para los amantes de los tragos con carácter pueden ser los cómplices perfectos para el comienzo y el final de una buena comida, pues los aperitivos y digestivos ya forman parte de la cultura gastronómica mexicana.
El enólogo José Flores explica que los licores aperitivos son bebidas que avivan las glándulas gustativas del comensal, para que en el momento de comer deguste el sabor y su apetito soporte una comida de varios tiempos.
"Comúnmente están hechos a base de hierbas, de cortezas o del mismo vino, pero todos los licores aperitivos son destilados.
"La costumbre existe desde hace muchos años, pero fueron los ingleses quienes implantaron el citar a los comensales a la cena con una hora de anticipación, porque era ahí donde se tomaba el aperitivo que, comúnmente, se disfrutaba en las rocas o servido al tiempo".
El grado de alcohol de los licores aperitivos varía entre los 15 y los 40 grados centígrados, en un abanico de cualidades que se ha ampliado a partir de que los europeos utilizaron la destilación de perfumes del Medio Oriente para aplicarlos en las bebidas alcohólicas.
Las características de un aperitivo se determinan por su sabor seco, amargo y tomado en una sola copa para disfrutar de una buena comida o cena.
"Entre las diferentes marcas se encuentra el vermut francés que es seco y amargoso, mientras que el vermut italiano es dulce, más válido para digestivo".
La magia de los licores aperitivos se inicia con una sola copa una hora antes de disfrutar la comida, pero en cuanto a los sabores, sólo su paladar podrá determinar cuál es el tipo de botella que le abrirá el camino a una fiesta gastronómica.
"Hay gente que toma un aperitivo dulce y después come muy a gusto, pero se supone que el dulce duerme el paladar, pierde el apetito y el gusto por los alimentos; por eso al principio se recomienda el sabor amargo".
Sin embargo, para quienes los aperitivos secos y amargos no resultan muy gratos al paladar y prefieren mezclarlos en forma de coctel con otros licores.
Dentro de los aperitivos recomendados se encuentra el Dubonnet, especial para ellas; el Akuavit para los hombres, por su fuerte sabor de origen nórdico; el Campari, el Benedictine elaborado a base de más de 20 hierbas, el Angostura y el Cassis, entre otros.
"El rito o el protocolo gastronómico menciona que se deben escoger tanto los vinos como los aperitivos dependiendo de la comida que se vaya a consumir, sin embargo, como es...
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