Ansían aseguradoras reforma
| Autor | Carlos Acosta Córdova y Eduardo Huerta |
APRO
MEXICO.- Si en la mayoría de los mexicanos encontró un abierto rechazo, la reforma fiscal que propone el Gobierno del Presidente Vicente Fox -cuya discusión se pospuso en el Congreso- causó un enorme júbilo entre las compañías aseguradoras: tras 10 años de reclamar al Gobierno, en todas las formas y tonos posibles, que permita a los contribuyentes deducir de sus impuestos los seguros de gastos médicos, en unos meses podrá ver coronada esa demanda, que le significará cuantiosos ingresos por la venta de pólizas.
De aprobarse la reforma foxista, toda persona física podrá deducir "las erogaciones efectuadas... en el ejercicio por los conceptos de primas por seguros de gastos médicos, complementarios o independientes de los servicios de salud proporcionados por instituciones públicas de seguridad social", según indica la fracción tercera del artículo 174 de la Ley del Impuesto sobre la Renta.
Es más, para beneplácito de las aseguradoras, el contribuyente estará obligado a comprar un seguro de gastos médicos, con vigencia de un año o más, si es que quiere deducir de sus impuestos "los pagos por honorarios médicos y dentales, así como los gastos hospitalarios, efectuados por el contribuyente para sí, para su cónyuge o para la persona con quien viva en concubinato y para sus ascendientes o descendientes en línea directa", según la fracción 2 de ese mismo artículo.
Y para darle todavía más empuje a las aseguradoras, los patrones que contraten primas de seguros médicos -para grupos de sus trabajadores, o para todo su personal-, también podrán deducirlas de sus impuestos, de acuerdo con el artículo 108 de la misma ley.
El presidente de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, Tomás Ruiz -padre del actual director general de Banobras y ex subsecretario de Ingresos de la SHCP, del mismo nombre-, no oculta su satisfacción:
Admite Ruiz que es muy baja la participación de la industria aseguradora en la economía nacional: menos de 1.5% del PIB, contra más del 3% en Argentina y Brasil, o el 5% del PIB en países desarrollados. Dos, dice, son las razones fundamentales: la poca capacidad de compra de la mayoría de los mexicanos y la falta de cultura en torno de los seguros.
Aun cuando la posibilidad de deducir los gastos médicos -previa adquisición de un seguro- es para todo el universo de contribuyentes, no hay duda que la dedicatoria no es para personas de bajo ingreso. Así lo reconoció expresamente el Secretario de Salud, Julio Frenk, el...
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