Andrés Clariond Rangel / ¿Dando y dando?

AutorAndrés Clariond Rangel

Termina el primer año en el poder de la 4T y se le sigue reconociendo lo mismo: la sencillez del Informe de Gobierno, la austeridad del Grito, el fin del besamanos, la vestimenta simple del Presidente, la ausencia de costosas pantallas.

¿Cómo estaríamos de hartos los mexicanos del despilfarro gubernamental para que no acabemos de lanzar vivas a la sobriedad de López Obrador? Una virtud que afortunadamente se ha trasminado al resto del Gabinete, cuyos miembros ya no son aquellos señores inalcanzables e infumables hijos del MIT y Harvard en trío amoroso con Yale.

Ahí está el caso de la jefa del SAT, Margarita Ríos-Farjat, alguien opuesto a uno de sus antecesores más famosos, Aristóteles Núñez, hombre intratable de Peña Nieto a quien no bajaban de "Don Aristóteles".

Hoy Margarita sin rodeos invita a la gente a saldar sus impuestos usando fundamentos sencillos y una licencia poética: invoca el patriotismo fiscal. ¿Será que no se vale festejar en el Zócalo mientras se regatean impuestos? Es un tema complicado y con muchas aristas, pero que es necesario discutir. Un asunto que incomoda tanto a los pobres insertados en la informalidad, como a los ricos que utilizan artilugios para pagarle menos a Hacienda.

Al parecer, anteriormente el tema de la carga fiscal no se discutía lo suficiente. Los ciudadanos simulaban que pagaban impuestos y el Gobierno simulaba que les daba un buen uso. Un tinglado que AMLO quiere desbaratar no sin cierta demagogia.

El Presidente enfoca su crítica diciendo que los grandes empresarios no pagan impuestos. No arguye que pagan poco o que deberían pagar más, declara categórico el nulo pago.

No es la primera vez que el Peje utiliza una estrategia de comunicación sencilla a la Trump. ¿Para qué molestar a la gente con matices? Transmitamos mejor un mensaje claro y contundente: estos hijos del demonio neoliberal no pagan impuestos, ocasionando con esto que muchos mexicanos tengan la idea de que las grandes empresas mexicanas pagan cero impuestos.

Un argumento que se cae con el dato duro de que en el 2018 las 10 empresas mexicanas más grandes le pagaron al fisco 126 mil 922 millones de pesos. Lo cual no quiere decir que estas compañías no deberían de erogar más o que hacen todo por pagar menos. Pero si nos vamos a meter a discutir sobre tributación, lo mínimo es manejar datos reales.

En un Gobierno que constantemente usa la moral y la justicia como estandarte, sería importante despejar si el pago de impuestos es un deber moral...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR