Andrés Clariond Rangel / Una cálida Navidad

AutorAndrés Clariond Rangel

Es particularmente difícil encontrar el tema para un artículo en estos días. Si el conflicto es la gasolina que mueve la pluma, en época navideña los pleitos brillan por su ausencia y la tinta se gangrena.

Vivimos momentos de amor y paz en los que "El Bronco" se reúne a tequilear con Diputados enemigos, Donald Trump contrata meseros mexicanos en su cena familiar y Peña Nieto invita a Carmen Aristegui a pasar la Noche Buena con él y la Gaviota haciendo propósitos frente a la chimenea de la "Casa Blanca".

Por eso, en esta temporada celebratoria suelen producirse dos tipos de editoriales: el que recapitula acontecimientos del año que está por terminar y el que enumera propósitos y predicciones para el venidero.

Una retahíla de sucesos conocidos y de predicciones que sólo empañarán nuestras fiestas. ¿Quién va a querer celebrar el fin de año pensando que puede ser el último si el Estado Islámico así lo decide? ¿Con qué humor se portará el gorrito de "Happy New Year" alertado sobre los cataclismos que azotarán el 2016?

Es mejor concentrarse en las cosas bonitas: los foquitos en las calles, los desfiles alegóricos, la piñata, los villancicos y los tamales. Un mundo a nuestro alrededor vestido de blanco y rojo en el que hasta la Cruz Roja se pone de moda en su labor de rescatar a quienes se les pasaron las cucharadas del ponche.

El espíritu navideño lo permea todo, incluido lo non sancto.

¿Sabe cuáles fueron las frases más buscadas durante estas fechas en uno de los más exitosos sitios de internet de material porno? "La Traviesa Ayudante de Santa", "Feliz Navidad" y "La Señora Clos".

¿A dónde hemos llegado? ¿Cuánta perversión tiene que contener un ser humano para disfrazar su apetito sexual de mono de nieve?, preguntaría una señora piadosa que vivió tiempos mejores, en los que la traviesa ayudante de Santa sólo era una fea duendecilla orejona y diminuta, y la Señora Clos combatía el frío del Polo Norte con un grueso traje de lana que no dejaba nada al descubierto.

No tema, mi señora, a su auxilio acaba de salir don Norberto Rivera. El 27 de diciembre, en su homilía dominical, el Arzobispo primado de México habló de una crisis de valores en la que se ha perdido el rol de la familia: "¿Qué puede hacer la familia sola frente a una sociedad que controla el ambiente familiar con los medios de comunicación; qué puede hacer frente a la escuela que, malinterpretando...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR