Alfonso Romo/ ¿Cómo será la alimentación?
| Autor | Alfonso Romo |
Presidente del Grupo Pulsar
Cuando pensamos en el año 2020, hay muchos asuntos interesantes con respecto a la evolución de los mercados alimenticios, la competencia industrial y los cambios en el gusto de los consumidores que son importantes. Pero entonces, como ahora, la gran pregunta para aquellos de nosotros que estamos involucrados en el sector de alimentos será: ¿podremos alimentar al mundo? ¿Habrá todavía hambre y desnutrición a gran escala o habremos alcanzado un mundo de alimentos nutritivos y abundantes donde hasta los más pobres se podrán alimentar a sí mismos? Hoy en día, en el amanecer del nuevo milenio en un mundo de plenitud, de cosechas récord y de precios comerciales en caída, 800 millones de personas están hambrientas y sufren las consecuencias de salud causadas por mala nutrición.
Para el año 2020, habremos agregado 1.7 mil millones de habitantes al planeta, aumentado la población del mundo por un equivalente a toda la población de México cada año. 98 por ciento de estos 1.7 mil millones de personas será de países pobres en desarrollo.
Tendremos más bocas qué alimentar y menos tierra para producir los cultivos para alimentarlos. La erosión de los suelos y la degradación causada debido a prácticas agrícolas pobres, las tierras cansadas y la contaminación nos quitarán grandes cantidades de tierras arables y no hay muchas tierras nuevas que podamos introducir al servicio de la agricultura.
En el año 2020, habrá más gente viviendo en las ciudades y esperamos que para ese año habrá más de 900 ciudades con más de 1 millón de habitantes. Ya que es poco probable que para el año 2020 hayamos resuelto los problemas de la pobreza rural, habrá una continua migración hacia las ciudades y la pobreza urbana se convertirá en el reto principal para el sistema alimenticio.
La agricultura tradicional de subsistencia no alimentará a los pobres de las urbes. Más agricultores pobres tendrán que modernizar sus prácticas y unirse al sistema de mercado. Tendrán que producir lo suficiente para alimentar a sus familias, a sus comunidades, y proveer para las masas urbanas.
Para el año 2020, el mundo estará totalmente consciente de la necesidad crítica de ayudar a organizar a los agricultores pobres para que puedan tener éxito en una economía de mercado y emplear la tecnología que generará los rendimientos requeridos de los cultivos.
Mejorar la calidad de vida y la productividad de los agricultores pobres es un asunto clave para asegurar el suministro...
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