Alebrijes panaderos

AutorNayeli Estrada

En las últimas semanas, la concha se ha cruzado con mantecadas, donas y churros en alebrijes panaderos.

"La concha se divide en dos partes esenciales: tapa y bizcocho. A partir de esta base, podemos hacer muchas combinaciones", reconoce Sayana Guerrero, creadora de Asu' Mecha, un lugar en la Ciudad de México donde se puede saciar el antojo de estos híbridos.

Pero, ¿caben las manteconchas, donchas y conchurras en la descripción "fácil y profundo" que Neruda plantea en su "Oda al pan"? ¿Podrán trascender la fiebre de las redes sociales y arraigarse en la tradición? Eso aún está por verse.

Lo cierto es que al fundir dos panes en uno, no sólo se conjugan técnicas y tradiciones, sino contenidos calóricos. Así que descubrir estos alebrijes de masa y costra azucarada requerirá considerable moderación.

MANTECONCHA

Hace una semana que este híbrido estalló en las redes; ahora está bajo la lupa del IMPI y el SAT.

Mediante una publicación en Twitter, el Servicio de Administración Tributaria declaró el pasado 18 de agosto, que piezas como éstas -que rebasan las 275 kilocalorías por cada 100 gramos- debían gravarse con un 8 por ciento de Impuesto Especial sobre Producción y Servicio (IEPS).

El Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual se vio involucrado cuando el registro de la marca manteconchas fue solicitado por Óscar José Méndez, de Tlalnepantla, sin importar que la propuesta fue de Josué Rivera, de la panadería queretana El Manantial.

Según explica Sayana Guerrero, hay dos tipos de manteconcha: la de Josué, hecha con masa para concha en un capacillo, y la mantecada cubierta con costra de azúcar, como la que ofrece Asu' Mecha.

Calorías: 298

CONCHACORNIO

Gracias a las redes sociales, la fiebre y fascinación por los unicornios se ha colado hasta la cocina.

A partir de la emoción desatada por estos equinos mágicos, pasteleros, panaderos y hasta grandes cadenas cafeteras han creado toda clase de bebidas y comidas multicolor, algunas incluso con grajeas estrelladas o brillantes destellos de diamantina comestible.

A diferencia de las otras piezas, esta concha, inspirada en los unicornios, no, es un "crossover", pero si un producto influenciado por las redes.

La técnica, la masa y la costra son los mismos de la receta clásica. Simplemente, las tradicionales cubiertas de vainilla y chocolate han cedido sus tonalidades naturales al efecto de los colorantes vegetales y las decoraciones de diamantina comestible.

Calorías...

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