Aldo Farías / Muerto el rey, viva el VAR

AutorAldo Farías

Cuenta la parábola india que un grupo de personas ciegas fueron elegidas por el rey para tocar un elefante y entregar respuesta de cómo era este animal.

Unos dijeron que era como una columna, otros como una tubería, un abanico y otros como una montaña, su respuesta dependía de la parte del elefante que estaban tocando.

Así como el elefante puede concebirse tan diferente, sucede lo mismo con el futbol. Algunos lo siguen entendiendo como un juego, otros como competencia profesional o hasta un sustituto de las guerras, también hay quien lo entiende como un gran negocio y hay quienes lo catalogan como una historia de la vida real.

Ninguno de estos ángulos está equivocado, al igual que el elefante, son todas partes de nuestro amado deporte y depende de nuestra perspectiva cómo lo catalogamos.

Tengo la fortuna de tener buenos amigos a los que no les apasiona el futbol, ellos ven este deporte como una gran telenovela y, seamos honestos, hay cada escándalo en el futbol mexicano que pudieran ser utilizados como capítulos de La Rosa de Guadalupe.

Gignac es como el príncipe azul que llegó a México, Pulido el chico malcriado, Nahuel un antihéroey así sucesivamente...

En esta telenovela llamada futbol, un nuevo personaje irrumpe con más fuerza de la acostumbrada. No se trata de un nuevo delantero, tampoco de algún personaje exótico como Honda o Ake Loba, tampoco de algún entrenador o directivo, de hecho, ni siquiera se trata de un humano.

El personaje emergente de esta historia y con grandes posibilidades de convertirse en principal se llama VAR.

Revisen las tendencias en Twitter de los principales partidos de la Liga MX y se...

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