¡Aguas al subarrendar!

AutorMarlen Hernández

Aunque con las plataformas de software dedicadas a la oferta de alojamientos, como Airbnb, puede parecer tentador el subarrendar, especialistas en derecho inmobiliario advierten al respecto.

"Es muy común que en los contratos de arrendamiento se mencione que no existe ni sesión ni está permitido el subarrendamiento por parte del arrendatario", afirma Alejandro Basave Alanis, director general de BCS Abogados.

"Entonces, ahí estaríamos hablando de un incumplimiento contractual y la penalización podría ser de una pena convencional si se pactó previamente o una indemnización por daños y prejuicios".

En el caso de la indemnización por daños y prejuicios, el monto es fijado por un juez.

En este sentido, Guillermo Terán Esparza, asociado de Leal Isla & Horvath, señala que el realizar este tipo de actividades cuando no están permitidas puede ser motivo de la rescisión o anulación de un contrato de arrendamiento.

Sin embargo, aunque en el contrato original no esté permitido el subarrendamiento, éste se puede realizar siempre y cuando exista un adendum de contrato -anexo que contiene información adicional- o una autorización por escrito y expresa por parte del arrendador.

"El tema con el subarrendamiento es el ligar muy bien al arrendatario de todas las obligaciones (...), es decir, que se especifique que aunque el arrendatario puedo subarrendar, él será responsable y cubrirá absolutamente todo lo que pase al departamento, ya sea daños o desperfectos", agrega Basave Alanís.

En el caso de las personas que antes de firmar un contrato ya se plantean la posibilidad de listar el inmueble a través de Airbnb o subarrendar por medio de otra...

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