Agravan riesgos rejillas hundidas
| Autor | José Villasáez |
En un área metropolitana en la que abundan los baches, otros obstáculos igual de peligrosos o peores salen al paso de los conductores.
Ante la falta de un plan de mantenimiento de las autoridades, rejas pluviales y registros hundidos o sin tapas, juntas de puentes dañadas y cruces ferroviarios en mal estado también proliferan en las vialidades principales.
Como ocurre con los baches, también estos daños ponen en riesgo a los automovilistas y pueden afectar a los vehículos.
Aunque el problema aqueja a toda la zona urbana se acentúa en Monterrey por contar con más vialidades e infraestructura dañada, que en unos casos es municipal, pero en otros es de empresas o de paraestatales.
Tan sólo en Tacuba y Félix U. Gómez, por ejemplo, tres de estos riesgos tienen que ser esquivados por los conductores.
Justo en ese cruce, un registro tuvo que ser tapado desde hace meses con una placa de acero ante el peligro que representa, pese a lo cual no es reparado.
Y a pocos metros, por Tacuba, un registro de Axtel sobresale del pavimento y otro más de agua potable está tan dañado que ya parece un enorme bache.
"Ese (registro de agua) ya ha provocado muchos carros ponchados, porque caen y se pegan en lo que es la tapa (metálica) y las varillas", denunció Alonso Rodríguez, vecino de los Condominios Constitución.
En Washington, casi con Félix U. Gómez, una reja pluvial que ya había sido reparada volvió a sumirse, quedando expuesto el filo del pavimento, lo que pone en peligro a los automovilistas y a los vehículos.
Un problema parecido se observó en Revolución, a la altura de Constitución, y en Churubusco, casi con Francisco Beltrán.
Otra reja pluvial como bache se presenta en el puente de Revolución y Chapultepec, en el sentido a la Carretera Nacional.
Pero en el resto del área metropolitana el mal estado de estas estructuras se replica.
En San Nicolás, un pluvial está hundido justo en una estructura que le fue añadida en una reciente reparación, en el cruce de López Mateos y Los Ángeles, mientras que un registro y juntas dañadas están al final de una gaza que conecta con Manuel L. Barragán hacia el sur.
Otro puente en la Carretera a Laredo y el Río Pesquería, en Escobedo, tiene también juntas dañadas, mientras que en la Carretera a Colombia, en el mismo municipio, un registro dañado está como un peligro, cerca del cruce con el Libramiento Noreste.
En la Avenida Las Américas, en Guadalupe, pasa un problema parecido por un registro cerca del cruce con la Vía a...
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