Vuela y seduce

AutorJuan Carlos García

GENTE / Enviado

LAS VEGAS.- Ni siquiera le hicieron falta alas a Céline Dion porque con la imaginación del productor Franco Dragone todo puede suceder: la cantante voló en su propio Coliseo romano, en donde coronó sus sueños con la fantasía hecha una experiencia musical en su show A New Day...

En el primero de los aproximadamente 600 espectáculos que ofrecerá en el Caesar's Palace, la intérprete canadiense se olvidó de los gladiadores y guerreros que la historia de Roma ubica en el Coliseo y lo llenó de bailarines y músicos para recrear con más de 20 canciones paisajes como si fueran pinturas con vida propia.

Michel Dion, hermano de Céline, dijo que estrellas como Barbra Streisand, Stevie Wonder, Tim Allen, los integrantes de *NSYNC y Heath Ledger acudieron al lugar para felicitar a la cantante y presenciar cómo dominó los nervios y hechizó con la potencia de su voz a los 4 mil espectadores que asistieron a la primera función.

Eran imprescindibles "My Heart Will Go On", "The Power of Love" y "Because You Loved Me", pero la gente se embriagó de emoción cuando Céline cantó "The First Time I Ever Saw Your Face", y alrededor de ella 20 bailarines "buceaban" por el aire como si salieran de una pintura hecha en el más puro estilo surrealista.

Le rindió un homenaje a Etta James con "At Last", a Peggy Lee con "Fever" y a Frank Sinatra con "I've Got the World on a String" cuando, suspendidos en el aire, aparecieron decenas de instrumentos musicales que se esfumaban en medio de efectos visuales que hace unos años habrían resultado imposibles.

A sus 34 años, Dion, quien también lanzó ayer su disco One Heart, recurrió a su espíritu divertido para charlar con el público y pedirle que rezara por la paz del mundo.

"Lo más contradictorio de todo esto es que me siento muy emocionada por el inicio de esta aventura, pero he de confesar que como cualquier otro ser humano me preocupa que no haya paz, así que enfoquémonos en buscarla", expresó entre lágrimas.

Tan vistosos como en el Cirque Du Soleil, los trajes de los bailarines contrastaron con los vestidos de gala de la cantante, quien en su propio Coliseo transportó al público con la fuerza de la imaginación a un palacio romano, a la Luna, a Times Square, a una playa en cualquier lugar del mundo y a un puente neoyorquino.

Le hicieron falta muchos de sus éxitos, entre ellos el que da nombre a su show "A New Day Has Come"; sin embargo, los espectadores derramaron lágrimas cuando cantó, a todo...

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