Visión Económica / Legislación bajo pedido

AutorSalvador Kalifa

El período ordinario de sesiones del Congreso iniciado el sábado 15 de marzo es el último de la legislatura actual y está siendo influenciado por los comicios electorales del 6 julio, por lo que no esperemos una labor útil de nuestros legisladores, quienes durante casi 3 años de funciones han demostrado su incompetencia.

Los integrantes de esta legislatura han fracasado en lo referente a las reformas estructurales. Eso no es un secreto. No debe sorprendernos, por tanto, que la opinión pública tenga muy poca estima por el desempeño de nuestros legisladores, por más que éstos tratan de justificar su gestión con todo tipo de excusas y explicaciones.

Me preocupa, sin embargo, que el daño que estas personas ocasionan a nuestra economía no se limita a la parálisis legislativa en materia de reformas estructurales, sino que va más lejos cuando promueven iniciativas de ley orientadas a beneficiar los intereses de grupos de presión que por décadas han gozado de privilegios y tratos preferentes en el país.

Este es un problema grave que pasa inadvertido por la mayoría. Nuestros legisladores no se conforman con una gestión deficiente, sino que además nos hacen creer que "cumplen" su labor mediante la emisión de una serie de iniciativas de ley, e incluso de reformas aprobadas, que aparentan ser positivas, pero que bajo el escrutinio profesional es evidente que van en dirección contraria a las necesidades del país. Son, en la práctica, un retroceso al objetivo de mejorar la competitividad de las empresas mexicanas y el nivel de vida de la población.

Lo anterior resulta, en gran parte, porque pequeños, pero poderosos grupos de interés, con el fin de seguir gozando de privilegios y rentas económicas a costa del resto de los mexicanos, se dedican a cabildear entre los legisladores, quienes son presa fácil por su ignorancia en materia económica o porque sólo se preocupan por velar por los intereses de sus partidos políticos. Estos grupos de poder son muy efectivos porque disfrazan sus intenciones verdaderas con los velos de la "soberanía nacional" y el "interés de las mayorías".

Un ejemplo es la propuesta del Partido Verde Ecologista para reformar la Ley de la Propiedad Industrial. La versión original, que luego registró algunas adecuaciones, proponía reducir el plazo de vigencia de las patentes farmacéuticas de 20 años, que es la práctica aceptada por casi todos los países del mundo, a 10 años para los medicamentos utilizados para atender el cáncer y el...

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