Reclaman arraigados evidencias

AutorMarisela Ortega y Enrique Lomas

EL NORTE / Chihuahua

CIUDAD JUAREZ.- Los dos acusados de asesinatos de mujeres y tráfico de órganos arraigados por la PGR son sólo chivos expiatorios, ya que las autoridades federales carecen de evidencias para incriminar a ambos sospechosos en tales ilícitos, afirmó Francisco Hernández, abogado de Hernando Valles.

"A ellos se les quiere vincular con el asesinato de tres de las ocho mujeres halladas muertas en el campo algodonero en noviembre del 2001, pero no hay pruebas", dijo, "son sólo chivos expiatorios para justificar trabajo".

El 14 de abril, el albañil y comerciante ambulante Miguel Angel Vásquez Villegas, de 29 años, fue detenido, sin una orden de presentación, por agentes de la Fiscalía Especial en la Investigación de Homicidios de Mujeres en Juárez acusado de secuestrar y asesinar a mujeres de esta ciudad fronteriza.

Vásquez, supuestamente torturado por los agentes dentro de la Academia Estatal de Policía, incriminó en la confesión al pasante de Derecho Hernando Valles como el que le pagaba a cambio de privar de la vida a las jóvenes para extraerles los órganos y luego venderlos.

Valles, al igual que Vásquez, permanece bajo arraigo en la Academia Estatal de Policía, ubicada a un lado del Centro de Readaptación Social para Adultos.

"A Vásquez se le ocurrió mencionar el nombre de mi cliente (Valles) porque ambos trabajaron juntos en el 2001, pero realmente no tuvieron un trato cercano entre ellos", dijo.

Vázquez es sospechoso de tres crímenes de mujeres cuyos cadáveres fueron abandonados en el campo algodonero de la Avenida Ejército Nacional, pese a que los choferes Víctor Javier García Uribe, "El Cerillo", y Gustavo González Meza, "La...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR