Pueden prevenirse pleitos por herencias

AutorAndrea Menchaca y Alejandro Olivares

De niños compartieron casa, escuela, juegos, fiestas y viajes. Pero de adultos ese tiempo parece haber quedado enterrado y ahora los hermanos se amenazan, se insultan y olvidan sus lazos para pelear por los bienes materiales que dejaron sus padres.

Esas batallas, que pueden llegar a las amenazas de muerte, no sólo suceden por una problemática económica, su origen está en la misma familia.

  1. EL ORIGEN

    Hace una semana, la comunidad se sorprendió con la violenta disputa por la herencia de más de 900 millones de dólares en acciones de Alfa del finado empresario Roberto Garza Sada.

    La herencia mantiene a sus cuatro hijos en un pleito que inició en los tribunales y de ahí pasó a las provocaciones, golpes y hasta amenazas de muerte, como quedó registrado en un video.

    Este caso tal vez parezca extraordinario, pero no lo es.

    Frecuentemente, los abogados y jueces de lo familiar reciben casos de familiares enfrentándose por una herencia que puede ser de cuantiosas fortunas o hasta sencillas propiedades.

    "Es más común cuando la voracidad y la falta de escrúpulos, de seriedad, de afecto filial se da particularmente entre hermanos, sobre todo quienes tienen posesión del patrimonio y lo quieren retener, a sabiendas de que la herencia debe ser repartida entre todos los que han sido designados en el testamento", señala Alfonso Verde Cuenca, presidente del Colegio de Abogados de Nuevo León.

    Sandra Garza Cavazos, directora del Centro Jurídico Gratuito de la Facultad Libre de Derecho, dice que ha visto estos conflictos tanto en juicios testamentarios, que es cuando la persona que falleció sí dejó testamento, como intestamentarios.

    En Nuevo León, estos casos se manejan en los 13 Juzgados en Materia Familiar que existen.

    "Yo te podría decir, en mi experiencia, que a lo mejor un 80 por ciento se arreglan amistosamente, incluso los intestados, pero bueno, siempre hay un porcentaje importante en el que no se arreglan así", indica.

    "Hay unos en que a lo mejor se batalla un poquito, pero finalmente se arreglan, y en otros pasan los años y no se arreglan".

    Cuando no se deja testamento, explica la abogada, la Ley dice que todos los hijos deben repartirse los bienes en partes iguales, entonces el pleito surge al decidir qué le toca a cada quien.

    "Pero hay casos que son más patéticos porque habiendo testamento, como quiera se presentan problemas porque 'no me gustó lo que dice ahí, yo no estoy conforme', entonces tratan de impugnar el testamento".

    Ha habido casos...

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