Opinión Invitada / Reynosa, de frente al País
| Autor | Opinión Invitada |
Elda L. Cantú
El otro día alguien me preguntaba por Reynosa. Aludía a varios correos electrónicos y comentarios que había recibido de que "las cosas están muy mal". Posiblemente estaba siendo amable al preguntar por mi tierra. Posiblemente esperaba una respuesta llena de signos de admiración y "qué barbaridades". Tal vez quería que le contara de los coches baleados y las mantas en los pasos a desnivel. Seguro esperaba que me ufanara de vivir en Monterrey, donde "gracias a Dios nada de esto pasa". En lugar de eso le contesté que lo de Reynosa no es nuevo, le aclaré que hay cadenas de email a cada rato y que no era cierto que se hubiera declarado toque de queda en la ciudad.
Mi familia y algunos amigos viven ahí. Sus testimonios no empiezan con "dicen que". En confianza, usan la primera persona: Vi. Estuve. Oímos. Lo cierto es que allá la vida sigue. La gente se encomienda a la divinidad de su preferencia, baja la vista, cierra la boca y se pone a trabajar como siempre. Porque nadie puede quedarse encerrado todo el tiempo. Porque las clases no pueden suspenderse indefinidamente, los negocios no pueden dejar sin trabajo a sus empleados y los ciudadanos no pueden sólo alimentarse de rumores.
Más tarde leí en EL NORTE que Reynosa amenazaba con ponerse igual que Juárez. Lo correcto hubiera sido escribir que la violencia de Reynosa amenazaba con ponerse como la de Juárez. Tal vez ya es así y no nos atrevemos a decirlo. Me queda claro que Reynosa no amenaza a nadie, sino es más bien al revés: la ciudad está sitiada desde hace tiempo. Por la violencia pero también por el silencio, el miedo y la ineptitud. Los que estamos lejos sólo atinamos a interpretar estos reportes como otra balacera más, otro enfrentamiento más, otra ciudad de este país fallido en el que todavía no aceptamos que vivimos.
La jornada mediática de Reynosa terminó para mí cuando escuché al Alcalde en un noticiero de cadena nacional. Si bien no esperaba sorprendentes revelaciones, la entrevista me llenó de insatisfacción y pesimismo. Yo no voté por Óscar Luebbert en la última elección, pero sí lo hice hace más de diez años en su primer periodo. Me parece un tipo serio y capaz y quería que sus declaraciones también lo fueran. En lugar de eso, la persona de quien uno quiere información creíble y tranquilizadora, citó reportes de internet y mencionó vagamente los operativos que otras fuerzas llevan a cabo en la ciudad. Luebbert dijo que hubo avisos en Twitter y Facebook simultáneos al...
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