Diván 186
| Autor | Josefina Leroux |
Confundida
P.- Josefina, ¡buenas tardes! Espero me pueda ayudar.
Soy una chava que lleva alrededor de cinco años en una relación con un amigo, que nunca ni siquiera ha sido mi novio. Sabe, yo lo amo tanto; primero empezamos a salir, éramos buenos amigos, después él me empezó a pretender y empezamos a salir.
Después me doy cuenta de que ya tiene novia, y ya teníamos como un año y siempre le pedí que formalizáramos la relación, pero él me decía que esperara, ya que él no estaba acostumbrado a una relación, y aunque él no me pidiera que fuera su novia, él así me veía.
Sufrí mucho y me alejé de él, y créame que en ese tiempo él me seguía buscando, y yo le evadía. No crea que soy una chava fácil, por eso, para mí es muy difícil. Después regresé con él como antes.
Lo he intentado dejar y él me busca. ¿Qué cree que él realmente sienta por mí? Claro, hemos tenido intimidad, pero nunca hemos llegado a la penetración. Él es la única persona con la que yo he estado y me digo, si él puede tener relaciones con otras personas, por qué sigue conmigo. Le pregunto y me dice que me ama, la verdad nunca he entendido.
Qué consejo me da. Le agradecería me ayude y me conteste.
R.- Sostiene Stemberg en su Psicología del Amor, que amor es intimidad sicológica, compromiso y pasión. Si falta alguno de estos elementos, sería un amor defectuoso o incompleto.
Pero a veces el amor no es tan claro. Los sentimientos y emociones pueden ser ambiguos y confusos. Una persona puede sentir querer a veces, y otras, ser indiferente.
Amar y odiar. Sentirse atraído por alguien y no estar dispuesto a comprometerse. Sentir cariño, pero no querer obligarse a la exclusividad. Son expresiones de la inmadurez. Una inmadurez que puede ser caracterológica y no de la edad. Esto significa que se puede envejecer y seguir siendo así.
Lo importante para no engancharte o sufrir esa relación ambigua es decidir qué quieres hacer con eso que te "da" ese amigo. Pareces no darte cuenta de que no te trata como sujeto, sino como objeto, porque no toma en cuenta ni lo que piensas, ni lo que sientes.
Quieres arriesgar e involucrarte sabiendo que puede ser un volado el que se comprometa o te deje por otra, o, de una vez, despedirte afectivamente y verlo eventualmente como amigo.
Tal vez el verte perdida le ofrezca una consecuencia por su falta de decisión que le lleve crecer y decidirse. No sería al primero que le ocurriera, pero, ¿valdrá la pena?
Ocupado en su tamaño
P.-...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba