Nombres, Nombres y... Nombres/ La difícil coyuntura interna, los relevos en IP y esta semana reuniones en ABM y CMHN

AutorAlberto Aguilar

COMO SABE, EL panorama económico no es para nada halagüeño en este 2003. Más allá del factor incertidumbre de la guerra, internamente existen también condiciones que a su vez enrarecen el clima de los negocios. Tan sólo la canibalización política que se presenta ha tendido a mermar la confianza.

En función de ello, la inversión que el año pasado tuvo un comportamiento muy acotado, en lo que va de éste se ha mantenido retraída en una buena cantidad de actividades. El empleo se mantiene constreñido, lo mismo que la recuperación del poder de compra. En ese sentido el consumo continúa estancado y el sector exportador no tiene estímulos por la situación de EU.

De ahí la preocupación de la IP por la decisión que se tomará esta semana en torno al tema del voto en el Consejo de Seguridad en la ONU. Ayer el canciller Luis Ernesto Derbez dijo que el gobierno aún analiza. Es obvio el riesgo que hay en caso de que se decidiera ir en contra de la resolución propuesta por EU.

Es en este contexto en el que justamente ahora se presentan varios relevos en la dirigencia de la IP. Por ejemplo en Concamín, Javier Prieto está por dejar la estafeta a León Halkim, mientras que en Coparmex José Luis Barraza sustituirá a Jorge Espina y en Concanaco Raúl Alejandro Padilla hará lo propio con Arturo González.

En breve también habrá cambios en la ABM, AMIS y el CMHN, agrupaciones en las que no hay todavía nada decidido, pero en las que serán importantes las decisiones en función de las amenazas que presenta la coyuntura y el proceso electoral del 2003 que podría definir el comportamiento de lo que será el resto del sexenio.

En lo que hace a los banqueros, esta semana se reunirá la comisión ejecutiva de la ABM, con la finalidad de definir el tema de la sucesión, que en esta ocasión se ha complicado debido a las responsabilidades que tienen muchos de los candidatos que se manejan.

Ya previamente los miembros de dicha asociación habían aceptado que el periodo para ejercer la presidencia se redujera a tan solo un año. De ahí que Othón Ruiz Montemayor esté prácticamente por terminar.

Lo que sucede es que dicha gestión se ha complicado en exceso en el marco del nuevo entorno que vive México. Antes la interrelación con la autoridad se daba exclusivamente con la SHCP, Banxico y CNBV. Hoy hay que agregar al IPAB, Condusef, los diputados, senadores, gobiernos estatales y municipales.

De ahí que se redujera el periodo, máxime los propios retos de la banca. Dos años para cualquier...

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