Coordenadas / ¿Es usted un directivo ético?
| Autor | Enrique Quintana |
¿Toma usted decisiones fundadas en la ética? ¿No discrimina cuando elige a sus colaboradores? ¿Actúa usted con justicia al interior de la empresa?
Si hace estas preguntas a directivos empresariales, más de uno le va a decir que lo ofende simplemente con formularlas pues desde luego que se califican como personas éticas.
Quizás hace un lustro, ser ético en los negocios no era tan relevante. Hoy, no va a encontrar prácticamente a nadie que abiertamente acepte que no lo es.
Por eso resulta de interés el trabajo publicado en Harvard Business Review de diciembre, "How (Un)ethical are you", de Mahazarin R. Banaji, Max H. Bazerman y Dolly Chugh.
El trabajo descubre que hay muchas más decisiones no éticas de las que parecen o se aceptan. Provienen de inclinaciones y tendencias de las que frecuentemente ni siquiera somos conscientes.
Le resumo lo que los autores consideran las cuatro principales fuentes de la falta de ética en las decisiones de las empresas.
1- Prejuicios implícitos: inclinaciones que emergen de creencias inconscientes.
Es lugar común en la mayoría de las empresas decir que se juzga a la gente en función de sus méritos personales. Sin embargo, con frecuencia tendemos a hacerlo en función de estereotipos en los que no reparamos.
Tony Greenwald, sicólogo de la Universidad de Washington, desarrolló hace algunos años una herramienta llamada "test de asociación implícita" para estudiar algunos de estos prejuicios. Desde 1998 se tienen registrados 2.5 millones de tests a nivel mundial y hay algunos datos interesantes. El 75 por ciento de quienes los hicieron muestran una tendencia inconsciente favorable hacia los jóvenes, los ricos y los blancos. Hay una tendencia desfavorable hacia los afroamericanos, árabes, gays y pobres. Desde luego que las preferencias se modifican en función del grupo al que se pertenece.
Revise usted, por ejemplo, decisiones que ha tomado en materia de reclutamiento de personal, de ascensos, de incentivos y seguramente descubrirá decisiones que no pueden escapar a sus prejuicios o estereotipos.
2- Inclinaciones que favorecen a su grupo.
Piense en algún favor que haya hecho recientemente a algún amigo, pariente o colega. Trate de recordar ahora algún favor que haya hecho a algún extraño. ¿No se acuerda de ninguno? Es natural, es humano. Sin embargo, a veces no nos damos cuenta de que esta tendencia a veces nos conduce a excluir a quienes no pertenecen al grupo con el que nos sentimos identificados...
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