Celebran hoy cierre del Jubileo
| Autor | Vicente Guerrero |
A escasas horas de que concluya el Año del Gran Jubileo, establecido por la Iglesia católica como celebración de los 2 mil años del nacimiento de Cristo, los fieles nuevoleoneses se apuran espiritualmente para conseguir hoy la indulgencia plenaria.
Es casi seguro que hoy, último día para hacerlo en la Iglesia diocesana, habrá largas filas y colas en los confesionarios de las parroquias locales para realizar el sacramento de la reconciliación, como uno de los pasos para obtener la gracia divina que "borra" los efectos del pecado y que sólo se otorga cada 25, 50 ó 100 años.
Para clausurar el año jubilar, la Arquidiócesis de Monterrey preparó una celebración especial a la que están invitados todos los fieles.
La cita es hoy a las 10:00 horas, en la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, de donde saldrán un contingente presidido por el Cardenal Adolfo Suárez Rivera, Arzobispo de Monterrey, y los obispos auxiliares José Lizares y Alfonso Hinojosa.
Unos 300 sacerdotes, 200 seminaristas y 2 representantes de las más de 150 parroquias, más todas las personas que deseen formar parte de la procesión jubilar acudirán al festejo, que saldrá del cruce de 5 de Mayo y Zaragoza y se irá por Zuazua hasta la Catedral, donde al final habrá misa y se hará la clausura formal del Año Santo en Monterrey, que mañana sábado el Papa Juan Pablo II clausurará de manera universal.
Ven sus frutos
En los 16 templos jubilares hoy habrá confesiones y comuniones, las que se dieron masivamente en este año de celebración, coinciden algunos sacerdotes que estuvieron al frente de sus comunidades parroquiales.
Lo más importante es que se acercó mucha gente a las parroquias y se fortalecieron los lazos de los diferentes grupos, sobre todo de jóvenes, señaló el Padre Miguel Angel Luna Lira, párroco de San Gerardo María de Mayela.
"A este templo acudieron las comunidades de 12 parroquias, hasta dos veces peregrinaron, en contingentes de hasta 2 mil personas", afirmó.
Rezos, visitas al Santísimo, Rosarios y misas diarias y dominicales se multiplicaron no sólo en la parroquia, dijo, sino en todas los templos del estado, pero más que una cuestión externa, los frutos fueron también espirituales como matrimonios regularizados ante Dios y hasta personas que regresaron al catolicismo.
En el municipio de Guadalupe imitaron la acción papal de abrir una puerta santa, que atravesaron los laicos que cumplieron con los requisitos para tener la indulgencia plenaria, informó el Padre Ricardo...
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