Desde Buenos Aires... / Bancarización

AutorRodrigo H. Bigliani

A no confundirse, ésta continúa siendo una columna deportiva y, pese a su titulado, nada tiene que ver con cuestiones bancarias o financieras. El fútbol continúa siendo nuestro común denominador.

Pero el efecto "Bianchi" que invade al fútbol argentino, parece haber cambiado los parámetros de protagonismo que históricamente han existido entre futbolistas y entrenadores. El paradigma que rigió en esta cuestión durante décadas, nos decía que los verdaderos protagonistas eran los futbolistas; los que pisaban el césped, los que convertían un gol, tiraban un "caño", o detenían un disparo con destino red. Pero las conquistas interminables del actual director técnico de Boca Juniors parecen haber invertido los factores. Y no se intenta juzgar aquí si esto es bueno o malo para nuestro fútbol; simplemente se procura describir una realidad tan indisimulable como indiscutible: los técnicos se han vuelto las vedettes de nuestro fútbol.

Tal es así, que esta corriente parece haber contagiado a los directivos de las demás instituciones a tal punto, que han intentado cimentar los nuevos procesos que se inician junto con el nuevo año, a partir de las expectativas que generan, ya no los nuevos fichajes que refuerzan los planteles, sino la contratación de los nuevos responsables de la dirección técnica de los clubes.

El cúmulo de presiones que recaen en la actualidad sobre los entrenadores, ha de ser la razón primordial por la cual la profesión se ha vuelto de alto riesgo y, en consecuencia inestable. Todos los técnicos, a excepción del intocable antes mencionado, se presentan en sus nuevos empleos con carpetas, programas y proyectos de mediano y largo plazo, cuando todo hace suponer que si los resultados no acompañan, podría suceder que abandonen (o los hagan abandonar) sus puestos, aún sin haber terminado de aprenderse de memoria el nombre de pila de todos sus dirigidos.

Este fenómeno de moda en el fútbol argentino abre un abanico de preguntas, que sólo encontrarán respuesta una vez que haya empezado a rodar el balón: ¿cuánto crédito tendrá el nuevo técnico de River, Leonardo Astrada, a instancias de iniciar el torneo clausura, si el saldo de los tres superclásicos de verano que disputará frente a Boca le da negativo? ¿Podrá...

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