Qué Buen Chal
Autor | Coco Diva |
Qué mala suerte
Por fin se me hizo ir a Craftika de nuevo, tenía ya varias semanas queriendo visitarlos y nada, por una cosa u otra me resultaba imposible, pero por fin el lunes pasado lo logré... bueno, casi.
Y es que llegando me voy topando con un anuncio en la puerta que decía que por haberse ido a buscar nuevas ideas para sus clientes, abrirían de nuevo el miércoles 28 de junio.
Por eso, pero, ¿qué onda si necesitamos un regalo en sus días de ausencia? Se me hace mala onda que nos dejen con la tienda cerrada, ¿qué no tienen alguien que atienda?
En fin, se los paso al costo, porque así como a mí, no dudo que le haya caído mal a alguien más llegar y ver ese recadito, sobre todo porque nos dejan con las ganas de comprar.
Para toda la familia
Regresé a la librería El Toboso buscando un regalo y como siempre quedé encantada con la variedad que tienen, además, con ese estacionamiento tan amplio, no batallas nadita.
La cafetería también está muy agradable, el menú variado y los precios razonables. Para que se te antoje darte la vuelta, hay el típico café americano, capuchinos y frapuchinos.
Y si tienes niños, llévalos los domingos a las 10:30 horas porque podrán pasar un rato divertido escuchando al "cuentacuentos" y disfrutando de un rico desayuno, mientras, los papás hojean algún libro.
Además dos o tres veces por semana tienen actividades a las 20:00 horas, ya sea la proyección y comentarios de una película o pláticas sobre algún tema de actualidad. ¿Y qué crees? No tiene ningún costo (el cuentacuentos y las pláticas), el único requisito es un consumo mínimo de 60 pesos en la cafetería.
¡A leer!
Hablando de libros, en una de mis vueltas a Plaza Cumbres descubrí que abrió la Librería Porrúa en la planta baja, a la entrada de Cinépolis.
Les quedó muy padre el local, los estantes en madera simulan laberintos y llegan hasta la parte alta del lugar. Los libros están acomodados de frente (en su mayoría), lo que permite que veas la portada de lo que buscas. Además, tienen un área para niños, con pequeñas mesas y sillas y los libros favoritos de los pequeños.
De verdad, vayan a buscar sus temas favoritos y no permitan que más librerías cierren, ¡necesitamos alimentar el buen hábito de la lectura!
Para artistas
Saliendo de la librería está un área dedicada a los niños que gustan de la pintura. Es un minitaller en el que cuentan con pequeños caballetes y pinturas de agua para que tus hijos pasen un momento agradable.
La entrada cuesta 15 pesos y...
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